La novela nos narra las peripecias de una familia suiza, que recala en una isla desierta y cuyos miembros tienen que desarrollar astutas maneras para solucionar sus problemas cotidianos tales como guarecerse de la lluvia, alimentarse o protegerse de los animales salvajes
No me parece un libro de aventuras. Es más bien el relato de unos náufragos y cómo se las ingenian para sobrevivir en un lugar que, al parecer, tiene todo lo que puede servirles para tal fin. No hay desventuras, ni acción o situaciones límite. Por el contrario, cada día hacen un nuevo y útil descubrimiento en esta especie de isla de la fantasía, donde conviven leones, tigres, osos, boas, búfalos, pingüinos y hasta cóndores. Entretiene al inicio, pero luego se vuelve pesado porque da la impresión de que siempre está sucediendo lo mismo. PD: me resultó bastante molesto que apenas se toparan con algún animal nuevo, y sin sufrir algún tipo de ataque, se los carguen a balazos y al final del día unas oraciones y listo, no pasó nada.