LAS AMISTADES PELIGROSAS

Novela epistolar. Clásico imperdible. Con tintes de humor y sátira, Choderlos denuncia la hipocresía de la sociedad francesa pre-revolución. Prohibido en su época, escandaloso y libertino, reflejo de la sociedad puritana (puritana?), su falsedad, la diferencia de género, su abominación. Dos malvados personajes, hombre y mujer, que mediante cartas entre sí, hacen alardes de sus conquistas amorosas, siendo ella (la Marquesa) quien tiene la supremacía en inteligencia, porque para él (el Conde) vivir con el "cartelito" de inmoral podría ser hasta perdonado, por ser hombre, pero ella sería una desvergonzada y apestada para esa aristocracia privilegiada que no era mejor que ellos, pero sabían "nadar y esconder la ropa". Denuncia la supremacía aristocrática mientras el pueblo muere de hambre (bien Francia, te libraste del lastre) Denuncia la supremacía del hombre sobre la mujer, donde ésta solo puede realizarse a través de un matrimonio (que pena para nuestro género) Denuncia la hipocresía que se esconde detrás de los extremismos (¿les suena? sigue pasando: detrás de un extremista, siempre hay un oportunista) Denuncia la perversidad de la gente adinerada (el poder, quien lo ansía, no lo merece) Denuncia la monarquía, parásitos, payasos, pavos reales frente a un país en la miseria (y que grande te hiciste Francia cuando sacudiste la porquería esa) Mantener las apariencias, en eso se basa el libro. El "que dirán" como estandarte para conducir la vida. Gente viviendo para otra gente. Perversión, manipulación, lobos con disfraz de oveja; tal y como es la gente escondida detrás de los criterios de otros para poder subsistir. Su lenguaje es del siglo XVIII, entonces ¡paciencia! Hay que interpretar párrafo a párrafo, oración por oración, llevar la traducción a nuestro lenguaje coloquial y apurado (como suele suceder en muchos clásicos). Me divertí leyéndolo, mi mente iba a Versalles y volvía, una y otra vez. Recuerdo las habitaciones de los reyes (separadas) su opulencia y su desgracia, pero no podía terminar de otra manera tanta burla a la sociedad civil de la época.

Novela epistolar donde se recrea una historia de perversión amorosa. Dos personajes, la Marquesa de Merteuil y el Vizconde de Valmont, que un tiempo atrás fueron amantes, se dedican a enviarse correspondencia donde explayan sus vivencias y conquistas amorosas mientras se ríen de la sociedad puritana y privilegiada en la que viven. Una historia donde queda reflejado el pensamiento de la aristocracia francesa de la época, pues mientras que el vizconde puede hacer alarde de sus libertinajes, la marquesa, una mujer viuda, debe disimular.

Novela sobre la perversión humana, ambientada en Francia en los años 1800 y previo a la revolución, nos narra a través de cartas las manipulaciones y perversidades de la sociedad, donde los hombres y mujeres se conseguían amantes y los (as) humillaban públicamente, siendo las mujeres que participaban de este juego mas discretas para mantener las apariencias en la reputación, razón por la cual el personaje mas interesante llega a ser la Marquesa de Merteuil y sus cartas donde explica el como se fue realizando así como actúa a diferencia del Vizconde de Valmont del cual es conocido sus actos. Se entiende que son varios los que participan de estos actos asi de varios cuya vida se ve destruida por ingenuidad de haber caído en la trampa de aquellas personas. el unico punto negativo es que a momentos se puede sentir melodramático bajando el ritmo de la novela. Existe tambien adaptaciones de esta obra siendo recomendable la de 1988 bastante recomendable

El título le va de maravilla, y mediante toda esta correspondencia, vemos el retrato de una sociedad hipócrita y en la que no había cabida para la bondad o la inocencia, pero en la cual, muy en el fondo, aun brillaba la luz de la justicia social.

Fantástico ejemplo de literatura dieciochesca y de los entresijos de la Corte... Previo a la Revolución Francesa. Género epistolar como evolución del folletín y tintes eróticos muy exitosos en su época y que ahora nos pueden parecer más suaves. Destaco por encima de todos la idea de "la carta pupitre", es decir, escribir sobre el cuerpo desnudo de la amante y emplazo a vivir esa experiencia, que seguro en pareja resulta divertida y prometedora.

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