Tras pasar casi veinte años de su vida en una prisión marroquí junto a toda su familia, Soukaïna Oufkir alcanzó la libertad, y desde entonces lucha por llevar una vida mejor. La vida ante mi es el balance novelado de sus padecimientos y ha sido escrito no por rabia ni por compasión, sino en homenaje a la niña a quien robaron la infancia y para redimirse, a través de la mirada adulta, de un horror que en 1973 no estaba capacitada para entender.