LA SOCIEDAD DEL NAIPE

Ramiro, residente de segundo año de Psiquiatría, descubrirá en su rotación por el Borda que el límite entre la cordura y la enajenación puede ser tan delgado como el grosor de un naipe, que Buenos Aires es una entidad viva donde se esconden muchos más misterios de los que se ven a simple vista y que el infierno parece moverse al ritmo del dos por cuatro. Con la ayuda de Beltrán y Ramón, dos pacientes que representan al detective y al artista marcial más famosos de todos los tiempos, se verá involucrado en un juego que no es todo lo inocente que parece y en el que el destino del mundo puede depender del resultado de la siguiente carta del mazo. En esta novela intrigante y ágil, el protagonista deberá resolver un enigma que, sin saberlo, ha heredado de un antepasado remoto y que lo enfrentará con quienes dieron origen a la misteriosa Sociedad del Naipe y a un nuevo juego de cartas: el truco

Me pareció un libro interesante, divertido y misterioso. Lo más importante, a mi parecer, es que la trama engancha y te dan ganas de averiguar junto a los personajes qué está sucediendo, qué va a suceder y qué es lo que está detrás y/o encima de ellos. Lo que me gustó es que uno nunca termina de descifrar si el libro es de un realismo mágico donde todo lo que sucede es real, o si el protagonista se está imaginando todo y está volviéndose tan loco como sus pacientes. La trama es loca y extraña, y no tiene mucho sentido que digamos... Sin embargo, sentí muchas cosas que me molestaron. Algunos de los diálogos parecían exagerados y puestos por conveniencia. Otros, parecían demasiado tontos e insulsos. Al final, durante la partida más importante, los diálogos se sintieron súper forzados para poder cerrar del todo la trama y completar tanto el misterio como el libro. A veces los personajes parecían incluso tontos. En ese sentido, no es un libro que intenta imitar a la perfección o darle realismo o seriedad a algunos de los personajes, sino que los presenta como ya dije, para cerrar la trama o para deslucir mucho más la línea entre la cordura y la locura. Otros diálogos, en cambio, me gustaron bastante. Hay algunas frases que resalto y que me llevo, aunque hablando seriamente, fueron las típicas frases cliché que uno imagina o pone en los locos. No por esto son menos interesantes o menos importantes. Lo que me agradó, también, es que se hablara bastante del truco y de las cartas, juegos tan importantes en Argentina. La novela transcurre en Buenos Aires y tiene no solo el típico voseo de acá sino sus lunfardos, sus ché, boludo, pibe y esas cosas que no se suelen ver en las novelas pero que nos acercan tanto a nuestra casa. En ese sentido, fue lindo viajar por Buenos Aires con los personajes. En fin, es un libro para leer sin mucha crítica y simplemente dejarse llevar. Algunas de las cosas suceden sin mucho sentido, pero bueno, estamos hablando de un libro donde los protagonistas son enfermos mentales y se creen, incluso, otros personajes. Lo recomendaría para una tarde aburrida, no hay duda de que atrapa.