La Hermandad de los Iniciados transcurre en una atmósfera de cuestionamiento filosófico, de todo aquello que se ha dado por supuesto, tanto en el ámbito familiar, cuanto en el social y el religioso; de los prejuicios en torno a lo que la sexualidad es y aporta a la vida del ser humano, a la dualidad entre el Espíritu y la Materia, a la idea del progreso material ilimitado a través del crecimiento económico y tecnológico, etc. De tal modo que, el lector, hallará en esta novela histórica una auténtica y honesta búsqueda de la Verdad, de esa Verdad que se encuentra allende las apariencias.