En una narración vívida, recogida por el autor con una grabadora, la vida de la bruja va desmadejando, a través de una cadena de historias vitales, los tres temas que comprenden este gran reportaje: coca, política y demonio, hasta lograr entrelazarlos, tal como sucede en nuestro medio porque, justamente, el libro es extraído de esa realidad que nos golpea.
Esos resentimientos no eran más que heridas que le había causado la gente. Porque usted piensa: un resentimiento es el pecado de no perdón, pero es que algunas veces se hace casi imposible perdonar porque están de por medio aquellas heridas.