Flup es un niño solitario y travieso. Sus abuelos tienen un desván lleno de cosas misteriosas. El niño los visita con frecuencia para comer y los ricos postres que le prepara la abuela.y para hacer de las suyas en el desván. Un día descubre un tarro de caramelos que sus abuelos le prohíben comer.Pero él le da uno a Blas, su hámster. ¡y descubre que los caramelos son mágicos! Gracias a ellos, Flup y su hámster, Blas, viven una aventura extraordinaria que pone patas arriba a toda la ciudad.