Los estudios políticos y literarios que integran este volumen fueron compuestos en medio de la tensión entre el inicial entusiasmo y el creciente escepticismo que tuvo lugar en la intelectualidad marxista a comienzos de los años treinta. Un punto central en los diferentes ensayos es la impugnación de la sociología vulgar y, sobre todo, de cualquier tentativa para derivar los fenómenos estéticos y filosóficos de la base material, y para emplear la literatura y el arte con fines propagandísticos.