EL ULTIMO PRESTEL: ROSA DE LOS CUATRO ESTADOS

Con lo primero que nos encontramos es con un mundo creado en un tiempo anterior al nuestro, donde nos encontramos en medio de aldeas y bosques y en el que las personas se dedican a oficios tales como la herrería, la pesca, e incluso a la hechicería. En medio de este mundo conocemos a Lulcio, un chico de 16 años que vive con su madre, quien ya desde el principio nos damos cuenta que guarda un secreto y hace todo lo posible para proteger a su hijo de este, lo que hace que te den más ganas de seguir adelante con la lectura para averiguar más sobre el tema. Los personajes, uff! desde el comienzo de la historia ya el autor nos presenta a unos cuantos como, el ya mencionado protagonista, Lulcio y su madre, Gerclass Reinmark, Lizauro, Delio e Irineo, a quienes se les irá sumando otros muchos personajes a lo largo de la historia, y que, personalmente considero que Amador ha hecho un gran trabajo con todos y cada uno de ellos, en cuanto a definir perfectamente sus rasgos para que no tuviéramos ningún problema en imaginarlos y conectar con ellos. Lulcio, al principio me ha parecido un poco demasiado ingenuo por momentos, y al que de vez en cuando, si hubiera podido, le hubiera dado un buen golpe en la cabeza para sacarlo de aquellas situaciones que él les daba la relevancia que no tenían y hacerlo reaccionar frente a otras que eran más importantes. Aunque también debo admitir que, quizá por esto mismo, ha sido uno de los personajes que más evolución ha tenido a lo largo del libro, y ese es un punto positivo que debo otorgarle al autor, por haber sabido perfectamente ir modificando la personalidad de un niño de 16 años a tal punto que nos ha mostrado como ha ido madurando a lo largo de la historia. Otro de los personajes que debo destacar y que en mi opinión es el que más me ha gustado, ha sido Delio, un personaje que rebosa bondad allá por donde lo mires e incluso en las situaciones difíciles que van viviendo. Sin embargo, el personaje que menos me ha gustado ha sido Gerclass Reinmark, no he llegado a conectar con él tanto como con otros, e incluso me ha parecido un personaje muy poco creíble, a pesar de ser consciente de que estaba leyendo un libro de fantasía. La historia en sí, al principio debo admitir se me ha hecho un poco pesada e incluso a veces era como que no avanzaba en la lectura, también esto puede darse a que quizás esta lectura la empecé en un tiempo donde apenas podía leer demasiado seguido y por ello me he agobiado un poco por el tiempo establecido, lo que no me ha hecho disfrutar tanto como me hubiera gustado de su lectura. A pesar de ello, no lo puedo catalogar como un punto demasiado negativo, pues se ha de tener en cuenta que es el primer libro de una saga y por ello el autor nos ha metido en unas maravillosas descripciones de cada lugar, cada batalla,... con un lenguaje tan apropiado de la época, que a pesar de ser algo complejas, una vez te has metido de lleno en la historia no son nada difíciles de entender. En conclusión, a pesar de todos los puntos negativos con los que me he encontrado a través de esta lectura, no puedo dejar de recomendar esta historia para todos aquellos que os guste el género de fantasía o a los que a penas halláis comenzando a leer libros de este género, porque será una muy buena apuesta para comenzar. El final me ha dejado bastante intrigada y con unas enormes ganas de poder disfrutar de la segunda parte, y ver como se desarrolla la historia.