El padre de Ricardo es escritor y es feliz contando historias. La mayoría de las que cuenta no suelen interesarle y procura evitarlas con alguna excusa, pero el día que avanza que le han encargado una nueva novela sobre Vicente Blasco Ibáñez y que su bisabuelo y él habían sido muy buenos amigos, Ricardo sabe que no hay escapatoria. Lo que no sabe es que, gracias a este encargo de su padre, descubrirá una época y un personaje fascinantes, así como muchos aspectos desconocidos de su bisabuelo y de su familia. Aunque el hallazgo más increíble de todos estaba olvidado en el piso donde su padre pasó su infancia. Gracias a él, encontrará su verdadera vocación.