EL AGUA DE LA VIDA

Sara Gruen, una escritora muy conocida, sobre todo por otra de sus novelas que tuvo una gran aceptación, “Agua para elefantes” traducida a 44 idiomas con gran éxito y adaptada al cine con Robert Pattinson como protagonista. Aunque en esta novela no consigue construir unos personajes tan atrayentes ni la originalidad en el desarrollo de la trama, yo tenía ganas de leerla, tenía ganas de poner una novela ambientada en Escocia y poder pasearme por aquellos fascinantes lugares, y, a pesar de que no sea una de las grandes, puedo decir que es sencillamente una entretenida historia con leyendas escocesas a su alrededor que es lo que me lanzó a leerla y además de un tirón. Dicho lo cual, la historia es un viaje, la autora norteamericana de orígenes escoceses, nos narra una historia muy sencilla que nos transporta hasta localizaciones maravillosas como el lago Ness, el castillo de Urquhart y la zona de Drumnadrochit, creando una buena ambientación. Una historia de amor en distintas localizaciones de Escocia en plena Segunda Guerra Mundial. Y, a pesar de la historia de amor, yo me siento satisfecha ya que se cumple mi deseo, visitar lugares de Escocia, y eso es lo que hago. Todo lo que hasta allí me guía lo tomo y además, lo disfruto porque los lugares son mágicos. La historia comienza en la nochevieja de 1944 en la que encontramos al joven matrimonio formado por Maddle y Ellis Hyde de la alta sociedad de Filadelfia, que intentarán recuperar la asignación económica y el favor del padre de Ellis, retomando la hazaña en la que el padre fracasó, demostrar la existencia del legendario monstruo del lago Ness. Vamos allá. Y en cierto modo, el monstruo del lago tuvo su momento de gloria. Hagamos memoria. Así dará comienzo el viaje a Escocia del matrimonio, acompañados por su gran amigo Hank, en el preciso momento en que Hitler está arrasando Europa. Se describe perfectamente el miedo a los bombardeos, así como la escasez de alimentos o la espera de noticias del frente. Sin embargo, a pesar de las miseria de la guerra, básicamente es una historia de amor con ciertos elementos históricos sobre la segunda Guerra mundial y también con interesantes momentos costumbristas. Instalados en un pequeño hotel rural que sufre las consecuencias de la guerra, los dos amigos saldrán tras el rastro del monstruo durante largos períodos de tiempo y dejarán sola a Maddle que irá convirtiéndose, poco a poco, en una mujer muy diferente de la joven rica y mimada que llegó, para ello es importante el personaje de Angus, el reservado propietario de la pensión. Emotivas escenas y fantásticas descripciones de los atractivos y míticos escenarios de Escocia nos permiten adentrarnos en ellos como si el viaje perteneciera a quienes lo estamos leyendo. Nochevieja, esa es la partida, salimos a buscar un relato, una historia partiendo de esa noche de melancolías, nostalgias y promesas. El relato nos acercará a una nueva e inesperada relación que dejará caer la anterior. Los restos inequívocos por las que pasa el amor y su inefable misterio, trajo a mí una frase inolvidable de una inmensa y bella película que transcurre durante el mismo período histórico: “el mundo se derrumba y nosotros nos enamoramos” la frase la dirige Liza a Rick en la conocida cinta cinematográfica Casablanca. El amor llega, no se le espera.

El agua de la vida es una novela de crecimiento personal que tiene como protagonista a Maddie, una joven y, aparentemente, consentida esposa, que carga con una triste y culposa infancia. Y mientras Ellis y Hank buscan a Nessy, ella inicia una suerte de búsqueda personal y liberadora que le permite descubrirse a sí misma. La historia está narrada en primera persona y, a través de su punto de vista, vamos conociendo a los personajes escoceses y la sincera amistad que entabla con ellos. Es difícil no empatizar con Maddie, ya que es un personaje transparente que, por momentos, nos conmueve, y por otros, nos divierte con sus comentarios espontáneos. La figura de Ellis, su inestable marido, adquiere mayor solvencia si se lo contrasta con Angus, el encargado de la hostería, un hombre curtido, paciente y contenedor, condiciones que seducen a Maddie desde un primer momento. Por otra parte, las logradas descripciones crean un entorno verdaderamente sobrecogedor en la penumbra de los ambientes del hotel, como así también en los refugios antiaéreos y una atmósfera fantasmagórica y mística en las aguas redentoras del lago.La Guerra, como marco histórico, permite destacar que no todos los hombres la padecen del mismo modo. Amigo lector, El agua de la vida es una novela amena, emotiva, superadora que no va defraudarte.

Me costo sostener la lectura en las priemeras paginas,pero despues no podia soltarlo. Es simplemente fabulosa. Una historia con suspenso que no te podes imaginar a lo que va. Lo recomiendo! Un 10🤓