Este libro lo empecé a leer por dos razones: la primera, porque quería empezar a practicar mi inglés con una lectura sencilla; la segunda, porque estaba arrumbado en mi librero. Sin duda alguna, es una lectura muy ligera, la puedes terminar en menos de dos días. Sin embargo, tampoco es una historia que aporte algo más allá de simple entretenimiento. Hubieron partes en las que sí me hizo reír, pero sólo un poquito. ¿Lo recomiendo? Pues, si quieres que alguien pequeño empiece en el mundo de la lectura, o si te gustan los chismes de un niño de secundaria, o quieres practicar tu inglés en un nivel muy básico; pues sí. PERO, de ahí en fuera, no lo haría (o sea, la mayoría del tiempo).