En el libro se analiza una amplia gama de partidas en las que se pusieron de manifiesto, más que una técnica depurada, unos razonamientos capaces de entroncar con las auténticas raíces del ajedrez. Se estudian las partidas jugada a jugada, desde el "interior" de sus protagonistas. La obra pone de manifiesto la mente, como mecanismo creador y analítico, de los Grandes Maestros.