CHAMBACÚ, CORRAL DE NEGROS

En Chambacú, corral de negros (1962), es una obra escrita por el colombiano Manuel Zapata Olivella quien retrata de forma contundente, haciendo gala de un magistral dominio del oficio narrativo, las situaciones de desigualdad social, represión, injusticia y pobreza absoluta existentes en ciertos sectores de Colombia, en este caso las comunidades afrocolombianas descendientes de esclavos; aunadas a las pasiones humanas, la violencia y la demagogia: ... “A los pobres nos es imposible mantenernos unidos. Es demasiado aspirar a tener una familia. Si apenas nos miran como gentes. Ya sabe que somos unos descendientes de esclavos. Yo soy el primero en toda mi generación que ha aprendido a leer.  Solo nos dejan el derecho de tener hijos como las bestias, pero nada más. Ni casa, ni escuela, ni trabajo. Estamos condenados a dispersarnos, a no saber nunca dónde moriremos. Esta tierra que pisamos no es nuestra. Mañana nos echarán de aquí, aunque todos sepan que la hemos calzado con sudor y mangle”.

En Chambacú, corral de negros de Manuel Zapata Olivella. Chambacú fue un barrio de Cartagena de Indias, Colombia, estaba ubicado en los extramuros del centro histórico de la ciudad, desapareció en 1971. Era considerado en esos momentos el tugurio más grande del país, fue escenario de uno de los proyectos de erradicación de tugurios más importantes en la historia colombiana, y el escenario central de este libro. El autor aquí nos muestra desde una perspectiva totalmente diferente la historia de los negros que vivieron el rechazo, el maltrato, el abandono y el desplazamiento por parte del gobierno: Chambacú no es un problema, es una población que día a día luchaba por sobrevivir y por encarar la muerte; resistiendo cada minuto contra el hambre, el sufrimiento y la miseria; luchando por proteger el espacio del que se habían adueñado los chambaculeros y por una vida digna; por la defensa de la familia; por la adaptación en tierras extrañas; era la lucha de la guerra que para esa época se perpetraba; y, por último, la lucha por la defensa de unas costumbres y por la búsqueda de una identidad. Todo esto se desarrolla en una Chambacú que al avanzar en la lectura podremos comprender que sólo es muerte, y es la muerte la única que, paradójicamente, parece sobrevivir.

Una redacción densa, altamente descriptiva con una narración atiborrada de personajes que van hilando la historia de la comunidad de Chambacú. Zapata Olivella devela la crudeza del racismo estructural e institucional en Colombia, humanizando una familia de personas negras que busca existir y también resistir entre la miseria. Es una maravillosa novela que al comienzo puede ser difícil de leer pero luego te envuelve su narración impredecible… el final es hermoso, entre la rabia y la esperanza.