Borracho estaba, pero me acuerdo es un retrato de la sombras de la ciudad, de su parte más oscura y más cruel, con la gente que se muere de frío en las noches del altiplano, donde siempre es invierno.
Este libro nos muestra un poco de la realidad oculta que se viven en las calles de La Paz-Bolivia. Un mundo donde las personas alcohólicas y drogadictas luchan por sobrevivir con lo poco que tienen e inclúso llegan a morir siendo ignorados por sus propios familiares...