"Todos seríamos mejores si tuviéramos conciencia de que más pronto o más tarde nos vamos a equivocar. De que nadie, por importante que sea, está libre de meter la pata. De que ningún nacido, por muy serio que se tome a sí mismo -y en esto hay individuos que rozan la sublimidad-, está libre de que en el momento menos pensado cualquier gilí -¿y por qué está tan seguro de que el gilí no lo es usted?