Una intensa y apasionante historia de amor en la Escocia Medieval.Sorcha Lennox, quien vive refugiada en un convento, es llamada por Gunelle MacNèil para vivir como su dama de compañía en el castillo de Mallaig. Baltair, el hijo de Gunelle, deberá acompañar a la joven en el camino y, durante el recorrido, se forjará entre los dos jóvenes un lazo muy especial. Pero al llegar y descubrir que el jefe del clan ha muerto, todo se trastoca. ¿Podrá el vínculo resistir a los hechos nefastos que amenazan la tranquilidad de la vida cotidiana de Mallaig?Continúa la historia de las mujeres de El clan de Mallaig, personajes entrañables que viven una vida fascinante en las Highlands escocesas.
No soy proclive al género romántico, el cual en este caso lo deniminan Romance Escocés. Sin embargo este libro narra la historia de Sorcha, una niña que por problemas políticos de su padre huye con su madre a un convento, donde el encierro es muy estricto, aunque ella puede salir y hace amistad con un diácono llamado Padre Gabriel, que le dará consejos e instrucciones para una vida práctica en sus condiciones; ella guarda correspondencia con el chico Ian y con su madre. Ante el acoso de la Madre Superiora para que Sorcha tome los hábitos, ésta nuevamente huye con el fin de visitar la tumba de su padre, que ha muerto. El destino la lleva al castillo de Ian y de madame Grunelle, su madre, después de pasar sola y sin dinero graves desavenencias . Más que una historia de amor, diría yo que es una novela con historia y aventuras, muy amena, y al final vislumbra el amor. Me gustó mucho.