LA MUJER QUE NO EXISTIÓ

No está mal, pero ya he leído varías novelas donde el fondo es el mismo, parece que los maridos dominantes están de moda. Se lee fácil pero no me pareció demasiado creíble

Un entretenido thriller, con un principio un tanto lento, lleno de giros que empiezan hacia la mitad de la novela. El final me resultó un poco previsible, no comento más sobre él para no desvelar el misterio. La historia empieza de una manera que al principio no parece aportar nada, pero no es así, todo tiene un porque, la verdad es que es bastante traumático y al final todos los cabos quedan bien atados, aunque el epílogo para mí sobra, no aporta nada a la historia. Ninguna de las personas alrededor de la protagonista conoce todo su pasado, sólo partes de él, y nos lo va revelando poco a poco. Realmente está sola, sin nadie en que que apoyarse y compartir sus temores, no puede confiar en nadie, ni siquiera en su marido porque su vida anterior es demasiado opuesta a su vida actual y no quiere que salga a la luz. Zoe y Henry ocultan sus pasados porque no están orgullosos de ellos. Y eso provoca esa sensación de suspense que angustia, por la soledad que los secretos generan. El ritmo de la historia va aumentando progresivamente al igual que la tensión y te va haciendo dudar de todo y de todos, con giros sorprendentes. Al final, cuando todo queda expuesto no sabemos cómo va a reaccionar Zoe, esto añade más estrés y suspense a la trama. Los personajes están bien definidos y ninguno hace sombra a la protagonista y configuran un magnífico thriller psicológico en el que lo que no se entiende es el título, sería mejor traducir el título por "La mujer que desapareció" por ejemplo.