LA CIUDAD DE LOS MUERTOS

¿Qué acabo de leer? Aún no lo sé con exactitud, pero, sin dudas, me ha encantado. Es un relato de poco más de 380 páginas adrenalínico, crudo, salvaje, realista, ágil e intrigante. Es un thriller policial de mediados del 1974, en el estado de Nueva York, en el que Paul Konig, un médico forense sestagenario a punto de jubilarse pasa su vida entre las exigencias del trabajo y un dolor punzante: la huida repentina de su única hija, Lauren (Lolly). Él es un experto en su trabajo, pero es prepotente, exigente, amargado, perfeccioninsta, ingrato, insensible e incluso grosero, pero extremadamente eficaz. Y por eso es el jefe. Sin embargo, (y no es spoiler) este doctor será taladrado por la punzante posibilidad de muy pronto "abrir" el próximo cadáver y que este sea el de su propia hija. A partir de aquí, hay un quiebre en su vida, un ajuste, una persecución, una investigación, un proceso doloroso y expiatorio de sus propios errores, todo esto condimentado con las actuaciones en crímenes que tratan de revelar Flynn y compañía. Personajes muy completos que son un espejo de algunos comportamientos clásicos en el ser humano y que están contradecidos en otros personajes. Un ejemplo sencillo: Haggard y su fidelidad, Strang y su perfidia. La corrupción, envidia, celos, avaricia, miedo, violencia y más, todo esto servido en un solo plato. Lo tendrás que devorar en 65 cucharadas, y las descripciones mismas de los cuerpos sin vida siendo examinados por estos médicos te hará sentir en la boca un extraño sabor a fierro, un resabio agrio en la garganta, una náusea por algún lado. Uno tiene que tener agallas y un estómago fuerte para terminar el platillo, suerte.