Bajo una ola de calor, entre turistas despistados y estudiantes extranjeros, el detecive Jackson Brodie se ocupa de sus casos en un Cambridge al margen de la imponente sombra de los colleges. Con la trama trepidante de un thriller y el calado de una novela psicológica, plantea un acercamiento caleidoscópico y plural al clásico relato detectivesco, que gana así en hondura sin perder ritmo ni interés.
Me ha parecido una historia bastante enrevesada, y que tiene más bien poco de novela negra y mucho de historia familiar, se nos presenta en los tres primeros capítulos tres casos, separados en el tiempo con desenlace trágico, y en el presente nos encontramos con el detective Jackson Brodie, que es de lo mejor de la historia, tiene un sentido del humor bastante cínico, pero los tres casos son bastante liosos y la trama se centra mas en la historia de cada uno de ellos que en una investigación detectivesca al uso. En fin, me ha parecido bastante flojo aunque el detective tenga bastante carisma.
Una excelente prosa entreverada y con mezcla de situaciones que obliga al lector a un ejercicio constante de atención y evaluación. Tal vez algo demás pero notable.