Un grupo de lo más peculiar abre un restaurante en el SOHO londinense. Susan, la propietaria, sacó el dinero para el negocio a su marido, un gángster. El cocinero es Hogie, que se hizo famoso con un programa de cocina en televisión y es aficionado a las drogas, a las tarjetas de crédito y a las mujeres maduras. Cheb, el maïtre, ha consumido de todo y tiene tendencias místico-filosóficas. ¿El menú? Un cóctel delirante de Cadáveres, sexo y drogas posmodernas. Nicholas Blincoe vuelve a mostrar el lado más enloquecido y peligroso de la noche.