Magnus Pym, paradigma de espías, llega al límite de su resistencia y se aisla en un refugio secreto para analizar su vida en una larga carta escrita a su hijo. Mientras, en el exterior suenan señales de alerta, y los recelos, sospechas y desconfianzas que forman el mundo del espionaje se centran en Magnus Pym, que deja de ser un espía perfecto para convertirse en un traidor despreciable al que hay que cazar, porque solo puede ser perfecto es espía atrapado, retirado o muerto.
No está mal , pero a mí juicio uno de los más flojos del maestro Le Carré, le sobran páginas con mucha redundancia, la parte que el protagonista escribe su biografía, se hacen al final algo pesadas, pero las de la investigación, con la paranoia y el procedimiento de los servicios secretos,ahí el maestro si que se luce, al final el personaje del padre del protagonista (inspirado claramente en el propio padre de Le Carré)se hace un po indigesto, la verdad sea dicha,si se hubiese ahorrado algunas páginas y se hubiera centrado en lo interesante, otro gallo nos cantaría.