TODO ESTO EXISTE

Gran historia humana narrada de manera exquisita por este autor en la que es su primera novela. En los años 80, se relata la historia de dos personas unidas en un mal momento de sus vidas para brindarse apoyo mutuo. El accidente nuclear de Chernobil viene a poner patas arriba esta ya de por sí extraña situación. El autor nos transmite de manera magistral el dolor, la soledad y la impotencia por la que tuvieron que pasar estas personas. Gran libro.

Una novela devastadora. Personajes muy bien definidos, fáciles de imaginar en la vida real. Una situación bastante posible que lleva a una solución un tanto arriesgada. Un viaje desgarrador por las frías calles de Ucrania, dentro de un pequeño piso que, de todo lo que allí se sucede, te llenará el alma de emociones dispares. Lo he devorado, literalmente. SERÁ TODO EL MUNDO DE ELLA. PERO ELLA TAMBIÉN DE ÉL.

De la infinidad de razones por las cuales dos seres pueden encontrarse y compartir vida e intimidad, he aquí la historia de una de ellas. Distinta a todas las que he vivido, visto, conocido o leído. Una historia única de dos personas, un director de un colegio y una chica de 16 años, a las que una catástrofe inesperada llevará a un horizonte de desesperanza y desolacion. Una historia de lealtad. Este amor es un amor diferente.

"Alexéi mantiene su mirada sobre la silueta de Irina recortada contra la ventana. La distancia infinita que en estos momentos la separa de él. La distancia infinita que en estos momentos la separa de todo". Todo esto existe, de Íñigo Redondo. Una historia de relaciones personales entre dos almas de mundos distantes ocupando el mismo espacio pero con realidades distintas. Alexéi, director de un colegio de una pequeña ciudad ucraniana que sobrelleva su soledad refugiándose en el alcohol, e Irina, una alumna adolescente con una demoledora historia sobre sus hombros. "A veces me imagino el sonido de la radio como un color". Porque la soledad tiene múltiples facetas y siempre hay una historia que te rompe, no solo en el origen de este sentimiento, sino en la capacidad de resiliencia de cada ser humano, utilizando distintas armas para cada reinvención. "La vida se ha retirado de este lugar como se retiró una vez del paraíso". Y es que Íñigo Redondo da un giro a la historia que la hace escapar de las manos del hombre, con un fascinante final que me ha dejado encogida en una esquina del sillón pero, asombrosamente en paz mientras una estruendosa devastación emocional se ha hecho cargo de mi alma. Gracias a Raquel González Topham por poner esta maravilla entre mis manos. Un regalo acertado que ha llegado en el momento idóneo de mi vida.

Entre las fantasías masculinas más comunes y antiguas está la del "caballero de brillante armadura", es decir la de rescatar a una damisela en peligro para así darle sentido a la vida de la rescatada y a la del rescatador. Al día de hoy esa fantasía también respeta un código proveniente de la Edad Media: el Caballero no necesariamente debe entablar una relación amorosa con la rescatada, puede haberla salvado solo por la nobleza de su corazón. Redondo retoma el tópico en su novela y la ambienta en la Ucrania a mitad de los años '80. El protagonista naufraga por la vida luego del abandono de su mujer y auxilia a una alumna víctima de abusos intrafamiliares. A partir de ese momento la historia se desarrolla sin demasiada profundidad, pero con una agilidad y una fluidez asombrosa. El final es un capítulo aparte, casi como si perteneciese a otra novela, una en la que el paraíso artificial que han creado los dos personajes no pudiese existir