Mar es una niña que inventa y juega, le gusta ser curiosa e inquieta, vive en Santiago de Chile y está aprendiendo cómo es el mundo. Un día su vida se fragmenta porque su papá desaparece, por una circunstancia que ella no alcanza a entender. A partir de esa ausencia, Mar realiza un doble tránsito: tiene que dejar la vida que conoce, a sus ocho años, para irse con su mamá y sus hermanos a una embajada y luego a México, un país ajeno; también enmudece y pasa los días en silencio, porque decide no hablará hasta que vuelva a ver a su papá.