La hermosa princesa del principado de Lienchtenstein languidece mientras representa su papel, acosada por la prensa del corazón y sometida a la rigidez de lavida pública. Su verdadera vocación es servir a una causa humanitaria desde la Cruz Roja. Por fin cumple su deseo y parte a Eritrea, donde se enamora de un médico altruista. Pero, cuando su padre y su hermano mueren en un atentado, la princesa tendrá que elegir entre el amor a su país o su felicidad junto a un plebeyo.
Recuerdo que este libro lo leí cuando tenía unos aproximados 9 años, lo leí unas tres o cuatro vecescon mi papá. ¿Qué puedo decir? Lo amo. Creo firmemente que si este libro no hubiese llegado a mi vida, yo no hubiese leído nada. Le guardo un infinito cariño por ser el primer libro que leí y ahora, a pasos de releerlo, sé con todo mi corazón que no me va a defraudar. la fortaleza de la protagonista es algo que siempre voy a admirar. Ella es princesa y odia serlo. odia tener que acudir a las celebraciones y odia sus responsabilidades que ser la hija del príncipe conllevan. Christina es una guerrera que, en lugar de quedarse acomodándose el vestido, toma la espada y sale adelante en su lucha.