Antonio Caballero logra retratar en esta novela emblemática, construida con el humor agudo y la sátira inteligente que lo caracterizan, la tediosa y provinciana Bogotá de los años setenta.
Es un libro muy inteligente en su humor. Ignacio Escobar es un poeta frustrado que va por la vida sin hacer nada e indiferente a todo lo que pasa a su alrededor. Un niño mimado, de la alta sociedad, machista y rebelde, al tiempo que se cree maduro, inteligente e incomprendido. De pronto, Ignacio se ve envuelto en una cadena de acontecimientos que son a la vez causa y consecuencia de su poco carácter y su incapacidad para tomar decisiones y posiciones frente a los que le rodean. Recomendadísimo!
Un libro icónico de la literatura colombiana, de elementos literarios diversos y afinados: de tipo lírico, prosaico, versificado. Además al pasar por sus líneas hay una enunciación del juego del conocimiento de autores que dota al personaje principal. Un hombre adverso, lúgubre, bohemio y con una incapacidad de emoción que lo hacen un sujeto frustrado frente aquellos que luchan contra su ensimismamiento.