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- SIGMUND FREUD Y STEFAN ZWEIG: LA INVISIBLE LUCHA POR EL ALMA
Sinopsis de SIGMUND FREUD Y STEFAN ZWEIG: LA INVISIBLE LUCHA POR EL ALMA
El intercambio epistolar entre Freud y Zweig muestra al creador del psicoanálisis en la doble faceta de Dichter (creador de ficciones) y Naturforscher (científico naturalista). Sus cartas nos ofrecen un material inagotable para poner a trabajar las propias concepciones psicoanalíticas, en el proceso mismo de su producción. En su correspondencia, Freud relata las diversas vicisitudes que rodean su la vida - expresadas por el decir poético (Dichten) de un gran estilista de la lengua alemana-; así como también transmite con claridad el pensamiento pensante (Denken) acerca de los mecanismos del inconsciente. Freud consideraba a los artistas como capaces de un acceso privilegiado a la otra escena inconsciente (eine andere Schauplatz), de modo que la figura de un creador literario de la talla de Zweig operó como estímulo para la redacción de una correspondencia plena de reveladoras consideraciones psicoanalíticas.
1 reseñas sobre el libro SIGMUND FREUD Y STEFAN ZWEIG: LA INVISIBLE LUCHA POR EL ALMA
Pequeño pero completo compilado de las cartas, postales y esquelas que estos 2 judíos austríacos se escribieron entre sí. Freud (el padre del psicoanálisis ) y Stefan Zweig ( el autor en lengua alemana más leído de su tiempo), 25 años menor que Sigmund. En la presentación leemos: “Zweig era para Freud no sólo un escritor admirado por la belleza de su estilo literario, sino también por la aguda capacidad de observación”. Ambos huyeron de Austria a causa del nazismo. Incipiente amistad de admiración mutua: se vieron, se hablaban por teléfono, se enviaban los libros que cada uno leía del otro y comentaba. Simpática la visita de Zweig acompañado de Salvador Dalí – éste a sus 34 años – a la casa de Freud en Londres. Freud le escribió: “Nada de lo suyo me pareció tan convincente, tan humanamente conmovedor, como este trabajo sobre la desdichada María Antonieta”. Zweig le escribió: “Todo lo que escribo está influenciado por Ud. y quizás sienta que el coraje para la veracidad, probablemente sea la esencia de mis libros”. Al final del librito están las palabras que Zweig – el 26 de septiembre 1939 - pronunció en el entierro de Freud de las que entresaco estas líneas: “Siempre que tratemos de penetrar en el laberinto del corazón humano, su luz espiritual ha de brillar en nuestro camino, como explorador y como guía .. Irreemplazable amigo”.
