SANGRE DE MONSTRUO

Séptimo libro de los originales. Sangre de monstruo es el libro que más nervioso me ha puesto sobre todo cuando se la comió el perro de Evan, o cuando empieza a crecer sin parar y te preguntas si va a parar alguna vez. Como siempre, me ha encantado.

Evan visita una vieja tienda de juguetes y compra una polvorienta lata de «Sangre de monstruo». Pero un día se da cuenta de que algo raro pasa con el viscoso líquido verde que contiene la lata. No para de crecer. Y crecer. Y crecer. Y todo ese crecimiento le ha dado a la sangre de monstruo un monstruoso apetito...

Entretenido.

Estaba reorganizando rincones del hogar (cosas de la cuarentena) y dentro de una caja al fondo de un armario, me he reencontrado con algunos de éstos "booms" literarios de los 90'. Los libros juveniles de la colección "Pesadillas". De los siete u ocho que me regalaron, éste, "Sangre de monstruo", fue el que más me impactó. Su historia basada en la botánica y en la ciencia, siempre me pareció más adulta y acertada que en el resto, más orientada a monstruos y sucesos paranormales. También era éste mi favorito porque los miedos y la intriga sí llegaban al final a algo, cosa que rara vez se resolvía bien en las otras entregas donde, despertaban tu curiosidad y luego, nada más empezar el capítulo siguiente, descubrías que nunca era nada extraordinario. Casi siempre alguna bromita de algún familiar, vecino u otro molesto personajillo oportunista. En resumen, "Sangre se monstruo" se queda en mi librería y el resto seguirá en la caja... o tal vez les dé otra oportunidad. Lo cierto es que con sus poco más de 100 páginas (si llegan) y la letra para miopes, se leen enseguida.