RELATOS DE KOLIMA: LA ORILLA IZQUIERDA

VARLAM SHALAMOV

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Sinopsis de RELATOS DE KOLIMA: LA ORILLA IZQUIERDA

La orilla izquierda reúne veinticinco cuentos en los que Shalámov continúa su cabal aproximación literaria a la vida de los confinados en los campos de trabajo siberianos. Este volumen es el segundo de los seis que forman el ciclo general, que ahora se publica íntegro por primera vez en castellano.

1 reseñas sobre el libro RELATOS DE KOLIMA: LA ORILLA IZQUIERDA

Relatos del GULAG en primera persona En “La orilla izquierda” Varlam Shalámov efectúa una aproximación literaria a la vida de los confinados en los campos de trabajo siberianos, el GULAG en el terrible desierto blanco de Kolimá. “El tiempo en una cárcel de instrucción se desliza por la memoria y no deja huellas perceptibles ni profundas. Para el detenido la cárcel donde se le instruye la causa — los encuentros que se producen en ella, sus gentes— no es lo importante. Lo principal, y en lo que se consumen todas las fuerzas anímicas, psíquicas y físicas, es la lucha con el instructor. Se recuerda mejor lo que sucede en los despachos del pabellón de los interrogatorios que la vida carcelaria. Ningún libro que se lea en la cárcel permanece en la memoria; solo las prisiones «penales», donde se cumplían las penas, fueron universidades de las que salían astrólogos, novelistas, autores de memorias. Los libros que se leen en la cárcel de instrucción no se recuerdan. Para Krist el duelo con el instructor no era lo que más le importaba; Krist comprendía que estaba condenado, que la detención ya era una condena, el juicio final. Y estaba tranquilo. Había conservado la capacidad de observar y, a pesar del ritmo adormecedor del régimen carcelario, aún no había perdido la facultad de actuar. Cuántas veces Krist se había encontrado con esta nefasta costumbre humana: contar a alguien lo más importante sobre uno mismo, mostrarse uno por entero al descubierto ante su vecino, ante su compañero de celda, de cama de hospital, de vagón. Estos secretos, conservados en lo más hondo del alma humana, en ocasiones eran demoledores, increíbles.” (Extraido del relato “El collar de la princesa Gagárina”)