Rafaela es una chica inteligente y sensible. Cuando conoce a Simón se enamora de él y piensa que él la correspoonde, ya que Simón admira cómo Rafaela toca el violón. Además, no paran de enviarse e-mails y Simón le presenta a su abuela. Pero Simón la trata sólo como amiga y confidente y esto hiere a Rafaela cuando descubre que sólo van a ser amigos.
Rafaela es una adolescente de los 2000. Adolescente que, de más está decir, quiere salir con amigas, comprarse ropa, saber de los primeros amores. Para Rafaela todo esto será el doble de complicado que para las demás. Es que ella, literalmente, se siente el doble. El doble de ancho que su hermana, por ejemplo, poseedora de un cuerpo "perfecto". Sumémosle a esto que la madre no aporta en la sanación de su autoestima y el padre ni asoma. En fin. La mejor compañía en casa de Rafaela es Minerva, su perrita. Ahora, lo que viene a romper con este maravilloso y deprimente cuadro es la repentina atención de Simón. Simón la ve, le escribe una nota, le pregunta cómo está, le envía un mail. Pará, Simón, pará. Es demasiado para el corazón de Rafaela y mi frágil corazón también. Más te vale que te portés bien, Simón, o vas a ver... Una hermosa historia que no es solo de amor adolescente, sino también de amor propio. Ojalá nos podamos mirar siempre a nosotros mismos con ojos amables...
Muy buen libro para todas las personas que no se sienten conformes con su cuerpo. Lo leí en la escuela y fue uno de los pocos libros que disfrute leer obligatoriamente. Siento que Rafaela es una chica con la que cualquier persona se puede sentir identificado, sobre todos los que están transitando la etapa de la adolescencia donde crecen los complejos, inseguridades y hay muchos cambios. Súper recomendado 💕
La verdad me tuve que comprar este libro porque fue el primero que leí en mí vida y tenía muchas ganas de recordar la historia que en su momento tan identificada me tenía... Rafaela es una chica muy buena e inteligente que sufre por su cuerpo, estando en la edad de la adolescencia ve como su cuerpo no responde a los cánones de belleza que la sociedad impone, más complicado se hace teniendo una madre hermosa y delgada, con la que no se lleva muy bien, y una hermana parecida a la madre con la que tiene una buena relación. Sin contar su grupo de amigas, todas son muy lindas. Un día, tras la caída en una escalera de su colegio pierde un arito y encuentra a Simón, dónde de un momento al otro comienzan los emails y los paseos. Me sentí en su momento tan identificada con ella, Rafaela sufría por ser gorda o de "caderas anchas" mejor dicho y yo sufría por ser demasiado delgada. Hoy lo leí, después de 10 años y me removió esos sentimientos y pensé que la sociedad y sus ideales de bellezas pueden llegar a hacer sufrir tanto a los adolescentes y los hacen creer que si no son de tal manera o no tienen tal cosa no son parte... Y duele, por experiencia personal puedo decir que duele y muchísimo.
Me encantó el libro, me sentí tan indentificada con Rafaela... La historia está tan bien redactada que se lee en una sentada, narrada como un diario/cuaderno personal, con cortos capitulos, llevadera y con linda trama. Lo unico que me causó disgusto fue el final abierto, me hubiese gustado un buen cierre, pero de todas maneras, una gran historia juvenil.
Este libro me encanto, hasta que llego el final.. El final abierto lo odie, porque me rompió el corazón.. Sufrí con Rafaela y ese final no era lo que esperaba, y lo peor es que no hay segunda parte.