PUNIN Y BABURIN

Leer Los Europeos ha resituado bastante el contexto y el transfondo de las novelas de Turguenev, que ya me fascinaban por su engañosa sencillez, su aire de anhelo permanente e insatisfecho, cierta rebeldía política frente a lo establecido, precisión y belleza en las descripciones, amargura y ansiedad en las relaciones amorosas... otra novela corta que se queda aquí, donde soy zar y juez de lo que me da la gana, como él en sus novelas.

El libro de Iván Sergueievich Turguenev tiene la estructura de la mayoría de las obras de la narrativa rusa, atrapando a quien lo lee en una trama que mezcla el tema de la novela en si mismo con el contexto histórico en el cual se desarrolla, al punto de que ambas parecen ser el objeto principal de la obra. Esto provoca la contradicción por la cual el lector acelera buscando el final, para saber cómo se desata el nudo principal pero a la vez en su interior alberga la secreta esperanza de que el libro se extienda y no termine nunca.

Una delicia de uno de los grandes escritores rusos. Releerlos es volver a disfrutar una y otra vez. Su único problema la brevedad que te deja con ganas de más. En mi opinión una excelente traducción.