Desde la publicación de su primer libro en 1944, España comienza en los Pirineos (reeditado por la Biblioteca del Exilio en 2008), Luis Suárez demostró su habilidad para, al tiempo que ejercer esa función de testimonio crítico que siempre exigió a la práctica periodística, trenzar un intenso relato autobiográfico plagado de hallazgos literarios. Así nos lo hace llegar en Puente sin fin. Testigo activo de la historia. Memorias parciales (2000), la autobiografía de un hombre de acción comprometido con su tiempo que hizo del puente entre las distintas orillas de su intensa vida (geográficas, culturales, políticas) el símbolo de su forma de ser y estar en el mundo.