POR SI LAS VOCES VUELVEN

23/11/21 Punto, set y partido para los locos Libros como éste dan sentido al " audiolibro". Ha sido un placer escucharlo de boca del autor, con sus chascarrillos y emociones. El libro tiene valor por su contenido, es el relato autobiográfico de una crisis psicótica. Durante el libro sientes que es más útil para aquellos que han vivido situaciones parecidas pero al final hay moraleja para todos. Solo una pega,( y el propio autor la comenta), me hubiera gustado que fuera más rotundo y tajante con el tema de las drogas.

Cuando conocí la existencia de este libro, pensé que hablaría sobre alguna enfermedad mental o algún trastorno de esa índole pero… va de un tipo que se ha destrozado el cerebro a base de tomar droga. Desayunar unos “porritos” no parece la mejor manera de mantenerse sano ni cuerpo ni mente pero encima defenderlo cuando has logrado salir de ahí, puede llegar a ser ofensivo, primero para las personas que realmente están sufriendo y luchando cada día contra esas voces de su mente sin haber hecho nada y segundo, para todas aquellas personas que han caído en las drogas que bien están intentando salir de ellas o bien no lo han conseguido. No me ha gustado ni el estilo ni el vocabulario que emplea. Sí me ha gustado la parte que trata de los diferentes planos, pero eso, Sr. Martín, se llama “universos paralelos”, es una teoría física realizada en 1955, aunque ahora los cómics lo han renombrado multiverso. Como ve, no es el primero en pensarlo. Pero a pesar de todo lo malo que he encontrado en esta lectura, el autor se merece un aplauso, por ser valiente, por contar, en este mundo hipócrita en el que vivimos, que él tuvo fallos, que no todo es perfecto. Es un buen comienzo para quitarnos la venda de los ojos y ver lo cruel que puede ser la vida. Es un libro que me ha costado terminar, en algunos momento dudaba si había leído el mismo capítulo otra vez. En definitiva, no aconsejo para nada su lectura. Si algo tengo más claro (porque claro ya lo tenía hace mucho), es: ¡droga, caca!

Ángel Martín escribió este libro tras como él dice "volverse loco' y cuenta toda su experiencia mientras cae en la locura, se cura y empieza de nuevo. Con éste libro intenta ayudar a los que están pasando por lo que él pasó o puedan pasarlo o como dice el título "Por Si Las Voces Vuelven". Un lenguaje sencillo y ágil y con una buena dosis de humor para, creo yo, quitarle un poco de hierro al asunto. Un libro , para mí extraordinario y muy necesario.

Me decidí a leer este libro, porque me sorprendió bastante que a una persona conocida, le hubiera pasado eso de "volverse loco". A mí al principio no me caía muy bien, porque lo veo muy serio, para querer hacer humor, a veces, pero con el tiempo, me empezó a gustar ese toque de sarcasmo, esa ironía con todo, y ahora que últimamente, lo veía casi a diario en tik-tok, con esos monólogos tan cortos y lo rápido que habla, las ocurrencias que tiene, pues mas me llamó la atención que, precisamente a él le hubiera dado un brote psicótico. Me parece una buena terapia para él contar lo que vivió. Lo que sentía, lo que creía, las voces. Añadir también que lo escuché en audio-libro porque al narrarlo él mismo, parece más cercano todavía.

En esta ocasión no voy a hacer una reseña como las habituales. Esta vez no os voy a contar cómo me sentí al avanzar en esta historia. Simplemente os voy a decir: LEEDLO. Por favor, leed este libro, escuchad el audio libro. Lo que prefiráis. Es muy importante que todos y todas tengamos esta historia en nuestra memoria. Tanto si has sufrido en tu piel una enfermedad mental, si lo ha hecho alguien cercano, incluso si no sabes mucho sobre el tema. Me parece verdaderamente importante lo que ha compartido con el mundo Ángel Martín y aprovecho para agradecerle el valor y la paz que ha dejado en mi tras acabar de leer " Por si las voces vuelven" . Tranquilo Ángel, si vuelven otra vez, estaremos preparados.💪🏻

Lo he escuchado en la app de PODIMO, y la verdad que te he amado Ángel Martín me puesto en tu situación. Y la verdad que te admiro, te admiro por lo que has pasado, por como ves ahora las cosas, por como estás luchando, te admiro porque eres grandiosos por tus deseos de ayudar también a los demás y por supuesto por ser tú y por tener una gran alma dentro de ti. Ole tu! Por eso este libro es de esos libro que toooodooo el mundo debería de leer de como el ser humano lucha a diario de cómo supera sus adversidades. Y la verdad que quiero decirte que este libro lo comprare en físico, porque quiero también ayudarte pero a ti, a que vendas muchos ejemplares a que te pongas de los más vendidos, porque Ángel créeme eres grande y te lo mereces todo. Cuenta conmigo para lo que necesites aunque no te conozco. COMPRAR ESTE LIBEO AYUDENLO. Gracias Ángel por hacerme ver tu cambio a través de ti, y por sacar esto a aluz. Eres vida lo eres todo! Gracias!!!💙

Tenía muchas ganas de leer este libro, porque siempre sorprende que un personaje famoso hable de algo tan íntimo y tan estigmatizado como es la salud mental. Además, como profesional de la salud mental este tipo de libros siempre me atraen. Cuando comienzas a leerlo puede parecer un poco caos, y en realidad la salud mental es un poco caos. Me parece que está muy bien narrada la experiencia desde dentro, adentrando poco a poco al leer en ese mundo. Pero lo más importante es que visualiza la salud mental, hablando claramente sin tabús y de forma directa. Además, del libro, existen charlas de Ángel al que no tienen entes famosos sobre la salud mental que no tienen desperdicio. En resumen, es un libro que recomiendo sin dudas.

Pensé: Un nuevo libro una nueva experiencia. No hizo falta sino abrir el libro y comenzar con su lectura para que aparecieran todas esas voces de las que habla el autor. La primera de ellas, como es lógico, era la voz del autor invitándome a leer su obra. Me contó sobre lo que trataba y me comenzó a preguntar si la voz que oía cuando leía era la de él o la mía. Creo que en mi cabeza resonó esa pregunta varias veces… Dijo que estar loco había sido lo mejor que le había pasado, porque, así lo interpreté, pudo llegar a unos planos más profundos de sus ser y aprendió que las palabras están hechas para el bien. Yo lo escuchaba, es de esas personas que les gusta mucho hablar. En medio de su apología a la locura, pensaba que esto yo ya lo había vivido, pero no recordaba ni cómo ni dónde. Quizás me hizo recordar a un vecino yonqui que siempre me invitaba a drogarme y me decía que como esa experiencia nunca iba a sentir nada igual. Mi voz, o una de mis voces, creo que es la que el autor llamaría la sensata , decía que la locura está bien, qué tal vez todos tenemos algo de locos (aquí me acordé del libro de Rosa Montero sobre el peligro de estar cuerda), que eso nos sirve para háblate cosas fuera de la rutina, fuera de lo común, cómo para mí lo es escribir estas reseñas pues es una actividad que nunca imaginé que realizaría, pero el loco que está en mí dijo que lo hiciera, que lo hiciera por mí. Ahora, tanto como que la locura sea un motivo de apología, ahí ya no estoy tan seguro, no lo creo… los términos medios están bien, al menos para mí. Seguí leyendo y pude oír otras voces. Se me hizo escuchar la de varios de los lectores que dicen que el libro ha sido muy monótono; otros que dicen que lo tuvieron que dejar apenas lo comenzaron porque el autor había sido claro en que ese libro no era para ellos; otros que encontraron entretenida y hasta cómica la experiencia del autor. Yo, con la disciplina que me acompaña a pesar de que me gustaría dejarla guardada en muchas ocasiones, no lo pude dejar. Y eso que oí la voz de mi hombre gris que decía: “déjalo Alejo, ya no podrá venir nada mejor, si no lo demostró antes no lo mostrará ahora”. Pude oír las voces de otros locos y de otras locas, decían que este sí que estaba deschavetado, que a ellos les había pasado otro tipo de experiencias. Decían que el libro habla de una experiencia personalísima, propia, y que, así como toda locura es distinta, los métodos para no padecerla, para enfrentarla o para convivir con ella, son distintos también. Estos locos sí que me hicieron reír. Quería terminar para no seguir oyendo esas voces, ya me estaban estresando y no quería que permanecieran en mi cabeza, menos mal el libro es corto. Lo terminé, lo cerré, lo guardé con los libros de la misma casa editorial que tengo en la biblioteca (ese orden, esa necesidad de clasificar, es otro rasgo claro de locura). Lo puse bien atrás… donde esas voces no puedan volver a escucharse.