El hallazgo fortuito de una fosa común, a orillas de un lago en el norte de Maine, pone al descubierto un espeluznante asesinato en masa cometido hace más de treinta años. Todos los miembros de una comunidad religiosa, los Baptistas de Aroostook, desaparecieron sin dejar rastro en 1964, y, ahora que sus cadáveres han vuelto al presente como una muda acusación, alguien parece muy interesado en que el misterio quede sin resolver. Pero el pasado regresa con inusitada brutalidad. La primera víctima es Grace Peltier, una estudiante que, al investigar sobre el fanatismo religioso en el estado de Maine, ha ahondado en la vida y el enigmático final de la comunidad de Aroostook. En apariencia, Grace se ha suicidado, pero hay indicios de asesinato más que suficientes para que la familia solicite la intervención del detective Charlie Parker, «Bird», el protagonista de las anteriores entregas de John Connolly.
Novela negra bien llevada, lo mejor de John Connolly son sus malos, son muy malos, pero con clase, el de esta novela es un malo que pica, ahí lo dejo. El protagonista sigue con sus "visiones" y su código. La historia es interesante, con algunas cosas previsibles, pero interesante por la forma de llevarla. Pero lo mejor de todo son los malvados y los personajes satélites, son más apasionantes que el propio protagonista. Otra cosa buena de estas novelas es que el autor nos ilumina con los temas que aparecen en el libro, en este caso El Apocalipsis. En conjunto, para leer y seguir con la serie.