París era una fiesta despliega el mítico panorama de la ciudad de París, la capital de la literatura americana hacia 1920. La obra es una mezcla fascinante de paisajes líricos y agudamente personales, con otros más contundentes y anecdóticos en torno a sus años de juventud en aquel encantado lugar en el que fue «muy pobre pero muy feliz» en un tiempo de ilusión entre dos épocas de atrocidad. Diario del hombre y del escritor, crónica de una época y una generación irrepetibles, este texto alinea en sus páginas a figuras como Gertrude Stein, Ezra Pound, Scott Fitzgerald o Ford Madox Ford. El París cruel y adorable, poblado por la extraordinaria fauna de la «generación perdida» y sus precursores, el ideal de juventud para Hemingway, protagoniza este vivaz testamento tan entremezclado de realidad, deseo y remembranza que Manuel Leguineche prologa sin escatimar entusiasmo.
Hemingway, nos narra los desenlaces y las vivencias de ese Paris hermoso por el arte que se está germinando, se mezcla la pintura, la literatura y todo esto entre la noche y un café.
Es un buen libro, la descripción es muy buena en verdad es una fiesta para la mente, nos hace disfrutar. Muy recomendable.
Nos remonta a sus comienzos como escritor y como conoce a Scott Fitzgerald para mí un genio, tremendo libro ,lo he leí y releí, si alguien sabe de el libro sobre la vida de Hadley su esposa me informan por favor
PARÍS ERA UNA FIESTA - Ernest Hemingway “París es una fiesta que nos sigue", le dijo Hemingway una vez a un amigo, y de esa idea surge un libro de vivencias en las que se formaba como escritor, y en las que se confesaba incapaz de escribir una novela, mientras escribía cuentos que no conseguía que llegasen a más. Allí, en París, entre vino, restaurantes y cafés, entre hambre y apuestas, a veces pasando penurias, vivía con su mujer y su hijo. Allí conoce a pintores y escritores, Generación Perdida; y allí en su París nos habla de Joyce y Fitzgerald, su descubrimiento de Tolstoi y sus cuentos por encima de otros grandes, o de Dovtoiesky y sus vicios magistralmente construidos. Los rusos, un descubrimiento. Sus vivencias son una amalgama que poco a poco se plasman sobre el lienzo de París, ese París que no se acaba nunca, ese París que siempre vale la pena. “Yo he hablado de París según era en los primeros tiempos, cuando éramos muy pobres y muy felices".
Hemingway describe sus vivencias en París con escritores coetáneos de lengua inglesa, principalmente con algunos de la llamada "generación perdida”. Es muy interesante para conocer cómo se conocieron, cómo se relacionaban o cómo vivían la literatura. Es una escritura directa, testimonial y, lo que mas me gusta, transmite vitalidad y amor a la literatura.
Un gran diario personal, editado póstumamente. Trasmite la magia Parisina de mediados del 1900 y tiene pasajes conmovedores tanto en la opinión de la escritura en primera persona, inspiración, omisión , el remordimiento y su relación con Scott Fitzgerald.
"Cuando me desperté y miré la ventana abierta y vi la luz de la luna en los tejados de las altas casas, allí estaba la sensación. Escondí la cara entre las sombras rehuyendo la luna, pero no pude dormirme y seguí dándole vueltas a aquella emoción".
'Si teneis la suerte de haber vivido en París cuando joven,luego París te acompañará,vayas a donde vayas,el resto de tu vida,ya que París es una fiesta que nos sigue'. (carta de Hemingway a un amigo en 1950)
"...lo único que tienes que hacer escribir una frase verídica. Escribe una frase tan verídica como puedas".
Cuando uno está en Francia pero viaja, los periódicos pierden interés, ya que muchas veces falla la continuidad de los variados crimes, affaires, o scandales, y además para que la cosa cobre toda su gracia hay que leerla en un café.
Si tienes la suerte de haber vivido en París cuando joven, luego París te acompañará vayas donde vayas, todo el resto de tu vida