PANICO AL AMANECER

Un profesor de un pueblo de Australia, al darle vacaciones, inicia su viaje estival para llegar a su ciudad natal Sídney. Por el camino, pernocta en un pueblo llamado Bundanyabba. Después de dejar las maletas en el hotel, se dirige a un bar a tomar una cerveza y ahí empieza su calvario, el primer día de su infierno. Al quedarse sin dinero y emborracharse un día tras otro tras conocer a peculiares vecinos de dicha ciudad y sus vicios, empieza un declive físico y mental . Para mi gusto es una buena novela.

Repito con Kenneth Cook y traigo la reseña de su novela «Pánico al amanecer», editada por Sajalín y con prólogo de Kiko Amat. ¡Qué bien me lo he pasado! Cuando la terminé, lo primero que pensé es que la mayoría de las veces se utiliza mal la expresión «al final me lié»: no merecemos emplearla, John Grant sí. Por muchas noches que te hayas saltado seguidas, esto sí que es un «al final me lié» en su máximo esplendor. Qué manera de meterse en medio de una vorágine, qué locura. Y pobres canguros 🙁 -¿Primera vez en Yabba, John? Esta es la pregunta que más de una vez le harán al protagonista de la novela, un profesor de escuela que acaba de cerrar el colegio de cara a las vacaciones. Maleta y cheque en mano, planea pasar su mes y medio de asueto en Sídney, ciudad cosmopolita, totalmente contraria a Tiboonda, pueblucho en el que vive el resto del año. Pero antes tiene que pasar por otra población, Bundanyabba (para los colegas: Yabba), desde la que finalmente podrá trasladarse a la capital. Sin embargo, una mala decisión o, más bien, una mala decisión detrás de otra darán al traste con sus planes. En Pánico al amanecer ocurre como cuando tu abuela te pone para comer una cantidad que alimentaría a una familia al completo y tú le dices que es mucho desde el principio, pero le es igual: te lo tienes que comer. Cuando has terminado, todavía te pone más. A esas alturas te sientes como el notas de Crónicas Carnívoras y aún queda: postre, café y algo pa mojar. ¡Ah, y este túper pa que te lo lleves!. Bien, pues en vez de tu abuela es un notas de Yabba, y en vez de ofrecerte comida... digamos que yaya empieza poniéndote una birra. Magnífica novela que no me ha defraudado. Al ser más bien corta, con lenguaje sencillo y muchos diálogos, cae en unas pocas sentadas, te ofrece más de una carcajada y te deja ojiplática en más de una ocasión. Maravilla. «Casi en cada capítulo de su pequeña tragedia personal podía recordar un momento de decisión en el que podría haber hecho que las cosas tomasen otro cariz.» Reseña completa en https://denmeunpapelillo.net/panico-al-amanecer-kenneth-cook/

Gran novela de genero realista !!! El lector se sumerge en el interior desertico de Australia......junto al protagonista; se involucra con toscos bebedores compulsivos, a la violenta caceria de canguros, al orgullo desmesurado de los nativos por su tierra. Y en este salvaje panorama van apareciendo las debilidades y miserias de John Grant. Se compadece y despotrica por lo que le toca pasar y al final.......como una iluminacion divina, se resigna a lo que viene con un optimismo insospechado. Colegas de Alibrate : es un disfrute la lectura de este libro !!!