El destino ha sido cruel con Celinda. Ha perdido una pierna en un accidente y con ella parte de su vida. Desde un amargo presente al que debe intentar sacar partido, la protagonista convive con su pasado: su infancia, la incomprensión, los dulces momentos en que se sintió amada, las traiciones, la ausencia… Sus fantasmas van y vienen condicionando su actividad diaria con sombra amiga con quien compartir el mundo. Una voz interior conversa con ella y va dirigiendo sus pasos: ha de aprender a caminar de nuevo por una vía completamente distinta.