ORLANDO

Qué belleza de novela! No dejo de soprenderme con la escritura de Virginia Woolf: original, sumamente reflexiva y por sobretodo, tan visionaria. Pareciera que la muchacha hubiera viajado en el tiempo a "pispear" el 2022 y haya vuelto a su recién comenzado siglo xx a escribir esta novela. En Orlando, nos narra la vida de un personaje muy particular, tomándose todas los atrevimientos que a ella claramente se le pueden permitir, como es el caso de lo fantástico, toques de realismo mágico, las hipérboles, anacronismos y muchas cosas más. Una novela hermosa donde Virginia nos hace reflexionar sobre los roles de la mujer en la época, hace reflexiones sobre la literatura, el amor, los mandatos sociales y la libertad que, vuelvo a decir, descolocan por lo actuales que suenan. Woolf recrea una atmósfera tan risueña y profunda, que tiene el poder dejarte ahí un tiempo en coma... Una vez más, una belleza leer a esta mujer 💕

Este es el cuarto libro que leo de Virginia, esperando enamorarme de esta escritora tan reconocida, dado que había leido que este es el libro menos trágico de sus novelas y que era un personaje que lograba ganarle a la vida. Siendo un libro interesante con algunos pasajes reflexivo sobre qué es el género, finalmente, siempre es una cuesta arriba, y lo terminé leyendo porque soy terca, pero que se alarga y uno tiene que seguir y seguir confiando que finalmente la historia se arme. Bueno, me debe faltar algo que no me permite apreciar eso que hace que otros amen a esta escritora. Lista 2021 Octubre: Autoras que no quiero dejar de leer este año.

"Porque parecería que escribimos, no con los dedos, sino con toda la persona. El nervio que controla la pluma se enrolla sobre cada fibra de nuestro ser, enhebra el corazón, perfora el hígado". Ceo que esta frase encierra la escritura de Virginia Woolf. Sexto libro que leo de ella y un sentimiento de libertad me embarga. En una época en que la mujer se hallaba tan limitada en su accionar, Woolf edita esta novela donde cuestiona todo, no se anda con medias tintas, decribe el papel de la mujer, el valor de la sexualidad, terriblemente feminista, con un lenguaje y forma único, brillante. A partir de una supuesta biografía, la autora se explaya por cuatro siglos de historia inglesa. Comienza en el período isabelino donde encontramos al primer Orlando, un joven noble y apasionado, favorito de la corte con varios amores que caerán al enamorarse de una princesa rusa. El desengaño amoroso que esto acarrea lo hará recluirse en la casa familiar. A partir de aquí Orlando comenzará a vivir diferentes vidas a lo largo de los siglos, siendo siempre el mismo. Intentará la escritura, será embajador en Constantinopla, cambiará de sexo, vivirá entre gitanos, volverá a Inglaterra. Si, un día despierta y comprende que su sexo ha cambiado, es mujer, sin embargo la persona es la misma. A partir de aquí tendrá que soportar las convenciones sociales, perderá muchos derechos, deberá soportar corcés y miriñaques, y tambien comprenderá el poder de su cuerpo en el hombre (bastará mostrar un talón para enloquecerlo). También descubre que el hombre vive encorsetado en las convenciones, siempre debe mostrarse recio, sin lágrimas. Orlando comprenderá que el tiempo pasa rápido, que las modas se desvanecen, lo que importa es vivir la vida según uno mismo, a partir de lo que se siente. Y va a luchar por esto hasta el fin de la novela. Imposible resumir, me quedan cosas en el tintero, solo decir que me encuentro ante una de las escritoras más fascinantes y valientes de la primera parte del siglo XX. Tanto en la historia como en la forma, exuda libertad desde su primera línea, hace lo que quiere, utiliza el género fantástico y hasta me atrevería a decir que se adelanta al realismo mágico, Tocó temas de lo más inquietantes para la época, hoy terriblemente actuales. Solo resta decir que amé cada renglón de esta novela.

~ O R L A N D O~ La sexta novela de la escritora británica Virginia Woolf, publicada en 1928, está inspirada en la vida de la que fue su amante, la poetisa Vita Sackville-West. A lo largo de cinco siglos, acompañaremos las peripecias de Orlando, así como también, asistiremos a su cambio de sexo. El protagonista que, comienza siendo un joven aristócrata de la corte Isabelina, despierta un día transformado en mujer. Mientras el lector va siendo testigo de la verdadera identidad sexual de Orlando, asistimos a un recorrido de cinco siglos de historia que, abarcan desde el periodo isabelino hasta la fecha en la que la novela fue escrita, 1928. Orlando es una novela compleja, introspectiva, en la que cabe destacar, la forma de explicar y exponer por parte de la autora, las desigualdades de género a lo largo de los siglos en los que ésta se desarrolla. "Los trajes no son otra cosa que símbolos de algo escondido muy adentro".

Cada vez me enamoro más de Virginia Woolf, una mujer tan adelantada a su época. Escrita en 1928 pero ya trataba temas de homosexualidad, sexualidad y el trato de la mujer en la época no solo como un reflejo sino como una crítica. Además de ello se burla de las novelas victorianas donde predominaba el protagonista masculino. Y es que en Orlando comienza con un joven acaudalado que de la noche a la mañana despierta siendo mujer (esto es el recurso utilizado para que Orlando presencie en primera persona lo que significaba ser mujer en la época). Y no solo esto sino que vive 5 siglos, para mostrarnos los cambios sociales. Es una lectura muuuy densa porque Virginia Woolf se caracteriza por los flujos de consciencia, de hecho en múltiples ocasiones tuve que volver atrás.

Woolf nos hace recorrer cinco siglos de la historia inglesa, a través de su personaje Orlando, un joven aristócrata que un día se despierta mujer. Novela fantástica, de prosa poética (se pierde en exhaustivas y extensas descripciones), no falta de surrealismo, feminista, donde se deja constancia de que el tiempo es relativo y de que la época en que nacemos condiciona nuestra vida y forma de pensar. La lectura de Orlando no resulta fácil, su prosa es densa y en cierta manera oscura. Se suceden pensamientos y reflexiones, ahora reales, ahora fantásticos, que contribuyen a la pérdida del hilo de la narración en sí y a una cierta desubicación. A pesar de ello, no deja de ser una novela ingeniosa y original, que no deja indiferente.

ORLANDO - Virginia Woolf (1928) Obra compleja que transcurre desde la época Isabelina hasta el 11 de octubre de 1928, con un Orlando que transmutará de hombre a mujer en el transcurrir de la Historia. Es una obra sobre la filosofía de la vida y la búsqueda de su sentido y en la que la grandeza de la existencia se vuelve ínfima y las pequeñas cosas grandes. Con cierto regusto a Realismo mágico y esa inclinación de Woolf por investigar e innovar en el campo de la escritura utilizando como ejes la identidad sexual de Orlando, un árbol, un libro, un hijo y el amor. Por cierto aseguraos, si emprendeis este reto, no carente de complejidad, que la traducción sea la de José Luis Borges, pues sólo un maestro puede exprimir como nadie este texto.

En la obra predomina un aire de libertad, especialmente atado a los derechos de la mujer, no otorgados, sino tomados. Aún al comienzo de la novela, en donde Orlando es un hombre, hay una mirada predominantemente femenina sobre la vida y la sociedad en general (si es que una mirada femenina es algo que existe). Hay luego un coqueteo social y amoroso, aumentado por un estrato social para el que parece no haber limitaciones… “la Reina, que sabía muy bien lo que era un hombre, aunque dicen que no del modo usual, ideó para él una espléndida y ambiciosa carrera. Le dieron tierras, le asignaron casas. Sería el hijo de su vejez, el sostén de su debilidad; el roble en que apoyaría su degradación.” La narradora es por momentos un personaje más de la novela, la que está subtitulada como “Una biografía” casi de manera satírica. Esa narradora se va metiendo en la historia y hasta por momentos propone diálogos con el lector, al que va aflojando a lo largo del tiempo. Las referencias a “la documentación” que respalda la historia de Orlando es muy graciosa. La biografía es en realidad un desfile a través del tiempo (más de trescientos cuarenta años) de la forma en que la mujer se ha empoderado y también de la forma en que la sociedad ha asimilado el rol de la mujer a lo largo del tiempo. El cambio de sexo experimentado por Orlando representa de alguna manera la vida de una persona que no se siente cómoda con su género y que busca siendo mujer, una nueva libertad. Durante la transformación, las tres señoras (Pureza, Castidad, Modestia) pierden la batalla contra la Verdad. Si quiso allí construir una fábula metafórica, le erró por lejos. De lo peor del libro. Luego hay un juego de ambigüedad constante que se sucede con varios personajes: el archiduque que se viste de mujer para conquistar al Orlando hombre, el hombre trans que la socorre tras un accidente en el campo, etc. Paradójicamente, en el período en el que debería haber experimentado mayor libertad (como mujer, con los gitanos) Orlando debe huir para evitar un atentado. Otra paradoja es la de estar convencida de no estar hecha para los compromisos y terminar casada. Fruto de ese casamiento nace su única hija, a la que la biografía ignora por completo, como corresponde a la narradora centrada en los derechos de la mujer y su libertad. En suma, el libro es muy imaginativo. Recorrer más de trescientos años de historia inglesa con un personaje que parece inmortal (de hecho, todavía está vivo al momento de finalizar la novela) es todo un mérito. Hubiera sido rico saber qué otras cosas pasaban en las sociedades de cada tiempo, más allá de las fiestas de castillo. Sólo al final, con la mención de algunos inventos de finales del siglo XIX y principios del XX hay alguna apertura al resto de la sociedad. A mí el mensaje feminista, si pretende tenerlo, no me llega ni me conmueve. Creo que predomina por sobre eso algunos gustos personales de la autora que no necesariamente son representativos de la sociedad como un todo, ni siquiera de las mujeres como colectivo: el amor múltiple, la falta de compromisos duraderos, el encantamiento repentino que vence al de largo plazo, el goce inmediato, el sexo como una criatura cambiante y escurridiza. La poética se va perdiendo a medida que avanza la historia. Curiosamente cuando la narración atraviesa al Orlando hombre es cuando las palabras toman mayor vuelo. Luego se diluyen y pierden consistencia. Algunos párrafos muy destacables… “La violencia era todo. Se abría la flor y se marchitaba. Se levantaba el sol y se hundía. El enamorado amaba y se iba; los jóvenes traducían en la práctica las rimas de los poetas . Las muchachas eran rosas, y sus estaciones eran breves como las de las flores. Antes de la caída de la noche había que cortarlas." “Era una tarde de asombrosa belleza. Al declinar el sol, todas las cúpulas, agujas, torrecillas y pináculos de Londres, se erguían negros como tinta contra las furiosas nubes coloradas del poniente.” “Cada doscientas yardas había un farol de aceite, pero la zona intermedia era como boca de lobo. Orlando y Mr. Pope atravesaban diez minutos de oscuridad; luego medio minuto de luz. Así nació en Orlando un estado de alma rarísimo. Al desvanecerse la luz, ella se sentía invadida por una deliciosa dulzura.” Miguel Nuñez www.facebook.com/groups/clubrondadelibros