Entre mis comedias en esbozo o totalmente trminadas- pero a mi parecer todavía fallidas en uno u otro aspecto- se hallaba la primera versión de Nosferatu, bajo un nombre y con no pocos personajes distintos a los de la versión posterior. Y no obstante, este esbozo era anterior a Pelo de tormenta, la primer reópera que di a conocer a mis amigos.