NO SOY LA BELLA DURMIENTE

Es una novela romántica contemporáneo, una excelente historia de segundas oportunidades y reencuentro, relativamente corta, sencilla, plagada de momentos ingeniosos, alocados, desenfadados y amenos, que te hará vivir una emocionante aventura de acción, con toques de humor y mucho amor.  Además cuenta con una trama de contrabando de diamantes de lo más disparatada y divertida, que te hará pasar momentos muy agradables. Una historia deliciosamente adictiva, disparatada y muy bonita narrada con esa chispa de magia tan propia de la autora y escrita de tal forma que hará que te enganches a la trama desde la primera página. Haciendote reír a carcajadas por las situaciones chispeantes que nos narran. La trama tiene como protagonistas a Sofia y Sergio. Ella era la gerente de una agencia de viajes, una tía que tenía cada curva en su sitio y no le sobraba ni le faltaba nada. Y vivía como la Bella Durmiente, esperando que un príncipe azul la despertase. Él, en cambio, es el atrevido, el ocurrente y aventurero que disfruta del día a día dejándose arrastrar por la corriente. Ellos se conocen de toda la vida y fueron novios y ahora volvían a ser vecinos. Eran la pareja perfecta sacadas de un catálogo de modelos. Una trama que a medida que avanza se iba enrollando más y más, con la presencia de una mafia venezolana de diamantes, con persecuciones, secuestro, un diamante y una boda inesperada, los efectos de un mojito y una canción que dice "No hace falta que te diga que me muero por tener algo contigo" Al principio me engancho y me encanto el tira y afloja de los protagonistas, descubrir más cosas de su relación pasada o las persecuciones pero según fui pasando las páginas y todo se volvía más surrealista y perdió un poco de ese encanto inicial.