MIL GRULLAS

La primera vez que lo leí fue hace varios años cuando estaba en la escuela primaria. Pero es de esos cuentos que nunca se olvidan y que te marcan de por vida. Es increíble como con tan pocas palabras empátizas y sufres con los protagonistas. Cómo es una historia corta y no quiero hacer spoilers, solo diré que trata sobre Hiroshima, un niño, una niña y mil grullas.

Elsa Bornemann explora con un tacto exquisito la historia de Sideki Sasako víctima tardía de la bomba atomica. Y en un libro infantil confronta el horror de la cruel e inhumana acción bélica con el temprano amor y la esperanza de Naomi y Toshiro. La realización de mil grullas de papel en busca de cumplir un deseo. Deseo que puede no ser conseguido, pero consigue un destello de fe más brillante que el destructivo artefacto.

Naomi y Toshiro son dos niños en Hiroshima de 1945. Unidos por el cariño y el afecto, el verano los sorprenderá con un sol estallando. Es la bomba atómica. En un acto de amor incomparable, Toshiro hará con sus manos mil grullas para salvar a su amiga. Una historia muy triste, pero enternecedora que demuestra el amor de Toshiro por Naomi. Una hermosa historia de la mano de Elsa Bonermann.

Uno de los más emocionantes cuentos que le dan vida dos inocentes niños, una historia muy triste llena de ternura, unidos por un amor indescriptible,  llena de esperanza, deseos de que la guerra acabase ( —Para cuando termine la guerra… —decía el abuelo—. Todo acaba algún día… ), llenos de amor ( El afecto de los dos no buscaba las palabras. Estaban tan acostumbrados al silencio… ), amistad,  recuerdo (...ninguno de sus empleados se atreve a preguntarle por qué, entre el aluvión de papeles con importantes informes y mensajes telegráficos que habitualmente se juntan sobre su escritorio, siempre se encuentran algunas grullas de origami dispersas al azar... )

La leí para la escuela. Una historia que marca a los niños y no tan niños. Amistad pura en su máxima expresión y con una lectura fácil y rápida. Ideal para preadolescentes (9 a 11 años).