Susan y Max se casaron contra la voluntad del padre de ella, quien aseguraba que él sólo buscaba el dinero de su hija. Durante su luna de miel, ocurre un accidente en la carretera y Max pierde la memoria. Se olvida absolutamente de todo y vaga por la ciudad sin rumbo fijo. Lo único que sabe es lo que dicen sus documentos: su nombre, y su profesión, médico. Tiempo después, un amigo de Susan se entera que está trabajando de médico en un sanatorio y se lo cuenta.