MEMENTO MORI

Los libros de Muriel Spark pueden gustarte o no. Pero hay algo que es innegable: esta mujer es sumamente inteligente. Muriel no es suave, no es dulce, ni condescendiente. Es hábil, astuta, feroz y tiene una capacidad anodina para hacer del sarcasmo un arte. Muriel lastima, pero lo hace tan suavemente que solo querrás pedir más. (🙂)Como creo que tanto en la vida como en la literatura, a veces es bueno arriesgarse, no diré nada de la trama. Solo que me reí y disfruté del humor negro de Muriel... hasta que leí apenas una frase, pequeña y anecdótica... Y ya no reí mas (☹): en un geriátrico, específicamente en un "rincón geriátrico" que es un espacio especial dedicado a ancianas que ya son un caso perdido ( " un caso geriatrico"), una viejita se baja de una cama, una cama con baranda, y cuando la enfermera vuelve a meterla en ella, la anciana gime con un lamento parecido al llanto de un recién nacido... Cuando leí esa parte oí como se me rompían las costillas y me oprimían el pecho. Y no sólo porque me recuerda que en los extremos de la vida todos somos indefensos y vulnerables(tanto en la infancia como en la vejez), sino porque recordé que durante más de 20 años ví con mis propios ojos lo que son los geriátricos: verdaderos vertederos donde uno deja al viejo que ya molesta y al que se quiere olvidar porque nos recuerda demasiado vividamente que nosotros también moriremos. El desgraciado de mi padre dejó a mi abuela en uno de esos vertederos y yo fui a verla desde mis 18 años. Hace unos 6 años presentí que no estaba bien y vine a verla (vivía en otra ciudad)...pues presentí tarde. Llegué de noche y a la madrugada me llamaron para decirme que mi abuela había muerto(😔). Y lo siento si son sensibles, pero esto es cierto: lo último que ví fue el cuerpo vacío de una mujer hermosa en un " rincon geriatrico", dentro de una cama con baranda, rodeada de gemidos cual llanto de recién nacidos con toda la desesperanza y la soledad de gente que es abandonada para dejarse morir. Un libro terrible pero absolutamente genial.