Esta novela está dedicada a todos aquellos que han perdido algo importante en la vida un amor, un trabajo, un tesoro y que, intentado esquivar la verdad, se han perdido a sí mismos. Es la historia de Massimo, un niño de nueve años que camina de puntillas por la vida, con la cabeza baja, porque tanto el cielo como la tierra le asustan, y que tiene que aprender a afrontar el dolor más grande, la pérdida de su madre. Y es un libro, ante todo, sobre la verdad y sobre el miedo a enfrentarla, a conocerla. La historia de una lucha constante contra la soledad y el sentimiento de abandono, relatada con pasión e ironía, con el convencimiento de que tras esa búsqueda se halla la conquista del amor y de una vida plena.