Los autores explican el nuevo rumbo que deben tomar las estrategias de marketing y comercialización de las grandes compañías y es que estas deben centrarse en las principales ciudades globales y en sus regiones metropolitanas, sin malgastar recursos desperdigándolos por pequeñas ciudades. Y cómo las empresas multinacionales deben cambiar la cultura corporativa de sus sedes, divisiones y filiales, así como la de todos los eslabones de su cadena de valor, con el fin de aprovechar estos cambios del mercado que ya se están sucediendo.