El separatismo es, sin lugar a dudas, el principal fenómeno social y político de la España actual y la mayor amenaza a su supervivencia como nación. Sus múltiples implicaciones condicionan de manera notable la vida institucional y el normal desarrollo de nuestro país, minan su cohesión interna y debilitan sus posiciones frente a los restantes estados de la Unión Europea y el mundo.Para justificarse, los movimientos separatistas ha venido desarrollando a lo largo de los últimos tiempos una serie de fundamentos teóricos basados, a su vez, en seis puntos principales: la historia, la lengua, la raza, la religión, el folklore y la simbología.