Sinopsis de LOS NOMBRES PROPIOS

¿Quién es Belaundia Fu? Es la mejor amiga de Marta a los siete años: la amiga invisible que, en esos momentos en que las cosas no salen como había planeado y ni siquiera la abuela es capaz de consolarla, se sienta con ella y espera hasta que se le pase. Belaundia Fu es la voz sensata, ideal e infalible que, cuando Marta tiene dieciséis años y pese a que prefiera no escucharlas, le dice las verdades a la cara: por ejemplo, que ese chico, Charlie, no le conviene. Pero cuando Marta ya ha cumplido veintidós, cuando ya se ha licenciado, cuando está empezando a tomar las decisiones que van a marcar el resto de su vida, ¿qué hace aún ahí Belaundia Fu? Ahí sigue porque es quien, desde siempre, le narra a Marta su propia historia. ¿Quién es Belaundia Fu?, nos preguntamos; y, sin embargo, la pregunta que verdaderamente importa es: ¿quién es Marta? Luminosa y emocionante, Los nombres propios es una indagación sobre la identidad y la relación que establecemos con el mundo que nos rodea. Dominada por una voz narrativa de una madurez excepcional, la primera novela de Marta Jiménez Serrano reflexiona acerca de cómo llegamos a convertirnos en quienes somos, sobre el hecho mismo de crecer y la manera en que lo hacemos: aprendiendo a nombrar aquello que nos importa.

7 reseñas sobre el libro LOS NOMBRES PROPIOS

Los nombres propios es un libro de crecimiento personal de Marta en su paso de la niñez a la adolescencia y finalmente a la edad adulta. Es la búsqueda de la propia identidad a través de todas las Martas que conviven dentro de Marta. Y ese camino lo hace a partir de una historia personal que no tiene nada de especial y justo por eso lo es tanto. Es la historia que podríamos haber vivido cualquiera de nosotras. Son los veranos en la piscina de casa de la abuela, son los juegos compartidos con los primos, son las comidas con el arroz de los domingos, son los primeros amores, son las copas con los amigos de toda la vida, son las primeras decepciones, son la pérdida del primer ser querido, son las primeras decisiones importantes, son los primeros anhelos de independencia, son los primeros errores. Y en esa sencillez nos identificamos con esa niña que una vez también fuimos y reconocemos a esa abuela con la que compartimos nuestros primeros años de vida, y a la vez nos identificamos también con la madre que somos y con la madre que todavía tenemos o tuvimos. Aunque el peso está en la relación entre Marta y Anuncia, la abuela. Esa abuela que te escucha, que te entiende, que te da consejos, que te acompaña, que te enseña a dar los primeros pasos para la vida. Esa abuela que quien la tuvo la añora. Pero aquí lo especial es que no es una historia anodina contada por una niña, sino que es Belaundia Fu, la amiga invisible de Marta, la que nos cuenta la historia. Y lo hace en segunda persona porque le habla a Marta y a la vez nos habla a nosotros, lectores, y de esa forma lo que le pasa a Marta nos está sucediendo a nosotros. Belaundia Fu se transforma en el flujo de conciencia cuando Marta crece y nos da la posibilidad de adentrarnos en su mente e ir de la mano hacia el mundo de los adultos donde Belaundia Fu ya no será necesaria. Marta Jiménez Serrano se nutre de trazos de su vida para ficcionalizar su primera novela y utiliza un recurso narrativo que le funciona muy bien consiguiendo a la perfección su objetivo, que el lector se sienta identificado. Una delicia literaria que toca el corazón de quien la lea, que te hace pasar por todas las emociones que trae la vida y cuando un libro consigue eso sólo se le puede aplaudir y esperar que eso sólo sea el inicio de una gran trayectoria literaria en el futuro.


Gran libro narrado en segunda persona de forma muy original. Una historia de crecimiento que te deja un sinfín de reflexiones. Muy recomendable


Los nombres propios es una novela con un singular punto de vista narrativo. La historia la cuenta la amiga invisible de una niña que la acompaña hasta la edad adulta; Belaunda Fu que así se llama esta compañera. Este ser ficticio ve a su amiga en el presente y en el futuro al mismo tiempo.El paraiso perdido de la infancia de la protagonista es la casa de la abuela en el campo donde comparte juegos y riñas con sus hermanos y sus primos.La vida de esta niña no está exenta de conflictos y frustraciones porque pese a crecer en un familia feliz el hecho de vivir ya es un proceso complicado, con muchos altibajos.El estilo de la novela intropectivo y tierno es lo que más me ha gustado. Cómo en un mundo tan pequeño caben en realidad todos los sentimientos; amor y desamor, estupor y tembloresi parafraseando a Amélie Nothomb.Es un novela que cuenta lo duro que es vivir aún cuando todo parece ir bien.No es la épica o la trama es el interior de una niña que creciendo y madurando ve que la vida es un conflicto permanente. La novela es un reflejo fiel de una generación preparada que al final acaba malviviendo con salarios muy bajos.Me la recomendó mi hija Elvira y me ayudó a entender un poco más a los de su generación.Personalmente me ha gustado mucho cómo describe a su madre porque me he visto reflejada y creo que muchas madres también lo harán. Una novela que se disfruta y se vive y que se lee de un soplo.No se la pierdan.


Este es uno de los libro más lindos que he leído este año. Me tomé unos cuantos días para procesarlo y poder escribir esta reseña que se volverá más en una especie de: por qué carajos tienes que leer este libro. Conocer a Marta en varias etapas de su vida nos hace empatizar con ella en todo sentido, incluso cuando sientes que se está equivocando, porque su otro yo -que viene a ser su amigo imaginario Beaulandia Fu- siempre está recordándole a cada minuto que algo hay que aprender. Es un libro muy simpático, bello, simple y que te da tristeza terminar porque incluso me hubiera gustado llegar más allá de donde el libro culmina. 10 de 10. No puedes dejarlo pasar, sentirás mucha tranquilidad en tu corazón, porque a cada cosa que Beaulandia Fu le dice a Marta, siempre tendrás un: lo sabía!, o un yo hubiera querido saber eso en esa edad también!.


Los nombres propios es un libro de esos que una vez terminando te dejan pensando sobre la vida. Me ha gustado como se desarrollan las distintas etapas de la vida . La infancia, la pérdida de la abuela, la adolescencia y la precaria vida laboral por la que Marta, la protagonista de esta historia debe pasar. La narración del libro es lo que le hace especial, pues nos lo va contando una niña imaginaria llamada Belaundia Fu, la cual aparece en la vida de Marta cuando tiene siete años y se queda con ella para siempre. Sin duda conmigo también se quedará cada vez que recuerde este fantástico libros. ❤️❤️❤️❤️


Maravilla. El mejor libro que leído en años.


Es una novela de aprendizaje que nos narra la transición de la niñez a la vida adulta. Por tanto, sus cuatro capítulos van a cubrir una etapa definida de la vida de Marta, nuestra protagonista: infancia, adolescencia, juventud (universitaria) y madurez (incipiente). Opino que hay algo muy interesante de esta obra y es que está narrada, casi en su totalidad, en segunda persona. Esta voz narrativa es muy compleja porque tienes menos recursos para hacer llegar la información, debes tener mucho cuidado con los diálogos y debes casi prescindir de los pronombres. La obra cuenta con cuatro partes. Las tres primeras son narradas en la voz de una segunda persona, Belaundia Fu (amiga invisible de Marta desde su infancia y quien le va a llamar la atención en momentos decisivos); es un narrador externo, una especie de “ser” que lo sabe todo. Es un narrador omnisciente en segunda persona, y que no forma parte de la historia. Este gran bloque narra el crecimiento y el desarrollo de Marta. Pero una vez superada esta etapa, la protagonista se descubre a sí misma: qué es lo que quiere hacer, qué es lo que quiere ser, con quién quiere estar, etc. Es como elegir su destino. Esta última parte se llama Marta y es narrada en primera persona. Y creo que eso es un gran acierto en la novela, porque la clave en este tipo de relatos es usar a otro narrador que va a implicar otra dinámica. Y nos va a mantener entretenidos hasta el final. Me ha gustado mucho este relato porque es diferente a lo que he leído últimamente. Y, además, por el tipo de narración nos transmite una gran carga emocional. Hace que empaticemos con Marta y su entorno. Podemos apreciar descripciones con mucho detalle, tanto de la ambientación y la atmósfera. Lo cual va a producir mayor impacto sobre nuestras emociones. El personaje de la abuela de Marta es indiscutible. Me encanta. Creo que cuando los abuelos aparecen en una novela, tienen casi el mismo protagonismo que tienen en la vida. Son de un peso tremendo. La relación abuelo-nieto es una relación de complicidad maravillosa y, sobre todo, sin miedos porque ellos ya han sido padres y han superado esa etapa. Leí algunas entrevistas de la autora y el personaje de Marta, probablemente sea su alter ego que ella usa para dar una especie de mirada con lupa a su pasado. Además, maneja este tipo de narración tan complejo de manera muy eficiente. Esta obra nos aporta un relato muy tierno y muy real. Simple y sobresaliente a la vez. Mi impresión es que todos nos hemos sentido reflejados en Marta y en todas las demás versiones “martas” en algún minuto de nuestras vidas. Nos vamos a conmover y a entretener. Así que recomiendo su lectura. Hasta una nueva reseña. Chau.


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FRASES DEL LIBRO LOS NOMBRES PROPIOS

Entonces, un 6 de enero. (...) Miras a tu alrededor, los papeles rasgados, de colores, todos tus regalos abiertos, tu entusiasmo, sonríes: "Jo, mamá, esto sí que es un Mundo Ideal". La miras: "¿Y a ti qué te han traído?". Qué le han traído: tu cara.


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