LOS ASESINOS DEL EMPERADOR (TRILOGÍA DE TRAJANO #1)

Fue mi primera vez y sin embargo creo que ni a libro ni autor les he hecho justicia. Así que ha llegado el momento de resarcirse e intentar desde la torpeza que acostumbro, abordar a mi autor favorito, si no como merece, al menos con más recorrido en esto de escribir reseñas. Sus 1200 páginas me daban respeto y, justo es reconocerlo, pereza. Pero un amigo librero se empeñó en no venderme lo que fui a comprar y endosarme el tocho de un tal Posteguillo. Pensé que era gallego y que el librero, que si lo es, estaba haciendo patria. 60 páginas le bastaron al profesor de literatura para que por mi sangre fluyera su veneno. Puede, incluso, que este señor bajito y con gafas, en un despiste, modificara mi Adn. Y es que la conjura contra Domiciano con la que arranca el libro y en especial, como el autor valenciano se pone en la piel de la emperatriz y describe su dolor, su asco y odio, son sin duda alguna, las mejores líneas que he leido de literatura histórica en mi vida. Inyectada, con especial habilidad y sabiduría la imperiosa necesidad de continuar, don Santiago hace un salto temporal para relatarnos como se llegó a la situación de que toda Roma deseara que el emperador viera la luz al final del túnel. Retrocedemos al final de la dinastía Julio-Claudia, es decir, la muerte de Nerón para asistir al año de los cuatro emperadores: Galba, Otón, Vitelo y finalmente Vespesiano, quien dio estabilidad a un imperio descompuesto e instauró la dinastía Flavia. Sin ser historiador, el novelista de la ciudad del Turia nos da una excelente lección convirtiendo las continuas y complejas sucesiones en una tarea fácil de comprender sin perder nunca un ápice de tensión narrativa. Culpa de ello son los cortos capítulos y las subtramas que en ellos vamos encontrando tanto de personajes históricos como ficticios. Y mientras los ejércitos de la ciudad del Tíber se desangran, ajeno a cuanto ocurre en la salvaje e indomita Hispania un niño crece a la sombra de un general. Ambos comparten el mismo nombre. Marco Ulpio Trajano. De ellos nos interesa el hijo ( aunque no perdamos de vista al padre) que crecerá en el seno de una familia acomodada y nacerá una inquebrantable amistad con, para mi, el mejor personaje de la saga, Longino. Poco a poco el niño irá creciendo y será testigo mudo del gobierno flavio y la persecución al cristianismo tanto de Vespesiano como de su hijo Tito. Intrigas, ambición y un demente Domiciano que no dudará en quitar de en medio a cuanto le estorbe para conseguir y mantener la Púrpura. Los asesinos del emperador pivota alrededor de dos figuras bien distintas. Un loco que ordena el asesinato de todo aquel que empieza a despuntar y un extranjero que emerge lo más discretamente posible. Destaco además la figura de Domicia Longina quien nos hará sufrir la mayoría de las veces, pero que representa el papel de la mujer en la antigua Roma a la perfección. Una novela histórica de gran extensión donde las páginas vuelan y donde el autor derrocha la mejor prosa de todos sus libros. Hablar de esta primera entrega como auto conclusiva podría tildarse de disparate, pero en cierta manera, lo es. Tiene final. El problema es que este, dado el apasionante viaje emprendido, te incita irremediablemente a querer saber más. Los que conocen la historia de este emperador poco novelado encontrarán a un Trajano casi sin tacha. Posteguillo no escapa nunca de ser partidista, es la tónica general de sus sagas salvo la de Escipión. Aún así disfrutarán de una novela casi perfecta. Para mí la mejor, por su desgarradora prosa y por la alquimia de transformar lo farragoso en comprensible y envolvente. Para los que no, ahorro desvelar como un extranjero logró llegar al trono del imperio que más fascina a los amantes de la historia. Con la venia de Egipto. Aconsejo incluso ruego, que se pierda el miedo a la larga extensión, solo lo parecerán aquellos que elijan la opción papel, por el peso de la sabiduría. Tus bíceps lo agradecerán. Una obra maestra. PD. Hasta aquí he llegado. Los más avispados comprobarán que ya hice otra reseña de este libro. Por lo tanto convivirán el antes y el después. Nos vemos en las sombras o si no: Ojalá que les vaya bonito.

LOS ASESINOS DEL EMPERADOR Los amantes del género histórico, estamos más que claros de lo que puede lograr un autor con su obra, y cuando se menciona el nombre de Posteguillo, las aguas se separan y los muros caen. Tal y como se hacía en la cultura Romana, este autor se debería divinizar por el legado que nos deja con su obra, que utilizando una grandiosa documentación, nos lleva a conocer escenarios, ambientes, armamentos y demás, en fin, una auténtica joya de ficción histórica, cargada de la cultura romana, personajes muy bien definidos y justificados a partir de la historia real, que ayudan a centrar la novela adecuadamente en tiempo y espacio, garantizando una lectura al 100% placentera. Una novela ambientada en el siglo I de nuestro tiempo, con una gran carga bélica, presenta de manera cruda y sangrienta, batallas, luchas, y un complot contra uno de los emperadores más brutales y sanguinarios que reinaron en Roma. Este primer libro, nos cuenta la historia de los nueve emperadores que Roma tuvo hasta llegar a Marco Ulpio Trajano, el personaje principal de la trilogía, quien fuese el primer emperador nacido de una familia propiamente indígena, no procedente de Roma. Pero ¿qué fue lo que sucedió para que Roma lograra aceptar por emperador a una persona que no nació en Roma? En torno a esta gran pregunta se centra la novela. Poco a poco se van enlazando diferentes acontecimientos sucedidos en tiempo y espacio, que gradualmente se arman como piezas de un rompecabezas. Construida con un rigor único, se puede apreciar todo el detalle en la descripción, gracias a la recopilación de información, lo cual conduce a un trabajo exquisito digno de admirar, donde se presenta la persecución de los primeros cristianos, los llamados apóstoles, la lucha entre reconocidos gladiadores de la historia, el asedio y la caída de Jerusalén, además de las batallas en la frontera del Imperio Romano con los Marcomanos (Germania), Catos, Dacios, Britanios y Partos. Gran parte de la novela está dedicada al mandato del Emperador Tito Flavio Domiciano (Dominus et Deus), un tipo singular y paranoico que nunca respetó las leyes de Roma, que rompió los paradigmas creados, logrando imponer un régimen de miedo, desasosiego y terror. Lo que más me ha llamado la atención, es ver como el autor logra darnos una descarga que casi electrocuta con el comienzo de estas más de mil páginas, llevándonos a la más alta de las intrigas de saber si tiene éxito la conjura hecha entre un grupo contra el emperador, y luego retrocede en el tiempo para llevarnos a conocer a Trajano desde su niñez, la educación y valores que recibió de su padre. Una trama que te mantiene enganchado hasta el final y que te hace pedir más y más.

Posteguillo una vez más, ha vuelto a escribir esta obra maestra. Impresionante todo el trabajo de documentación y no solo en contexto histórico, sino en el más ínfimo detalle cono son las ropas de cada tipo de gladiador, el sistema de alcantarillado entre otros, que lleva el autor detrás de la obra para darle una veracidad total además de saber expresarlo e hilarlo de una manera exponencial. Comienza la novela dándonos con un golpe maestro la conjura del final sin desvelarla para mantenerte en todo momento a la espera de la resolución. Esta obra trata sobre el ascenso del primer sendaor hispano, Trajano, hasta el poder de Roma. Para entender como se produce el ascenso de Trajano es necesario remontarse varios años atrás y contarnos como fue evolucionando el trono con difentes Augustos y como cada uno de una manera u otra fueron la causa de este ascenso.

Absorbido totalmente durante 11 días leyendo estas casi 1200 páginas. Ni siquiera recuerdo un libro que lo devorara así de rápido. Una novela histórica que he disfrutado desde la primera página. Aquí no solo disfrutas leyendo de una pequeña época de la Antigua Roma, sino que te instruyes, que aprendes acerca de la vida de sus emperadores, de sus excesos, traiciones o locuras. Entras en la vida de gladiadores (y gladiadoras), de las familias imperiales, de esclavos, de senadores, de poetas… En este primer libro de la trilogía de Trajano, no conocemos demasiado sobre el primer emperador hispano, exceptuando sobre su adolescencia y primera juventud. Pero conoceremos a su padre que comparte sus mismos nombres y será para él un espejo en el que reflejarse siempre. Sobre todo viviremos el ciclo de otro emperador: Domiciano. Que por buscar un adjetivo a éste, vamos a llamarlo déspota, y a partir de aquí, buscad todos los sinónimos aplicables. Mi único “pero” a esta novela, porque seamos sinceros, siempre me gusta diferir a la perfección, es que probablemente ni Trajano fue el Santo que no bajó nunca del pedestal ni Domiciano fue el demonio personificado, aunque bien lo pareciese por su forma de gobernar. Pero esto no le quita un ápice de esplendor a esta novela; es simple y llanamente sublime. Es la tercera novela que leo de este autor (todas este año) después de la bilogía de Julia Domna, y tengo la certeza de que este va a ser mi año Posteguillo.

Qué puedo decir de esta novela histórica que no se haya dicho ya. ¿Qué es magnífica, impresionante, perfecta, espléndidamente bien escrita...? Seguro que me quedo muy corta con los calificativos y me dejo muchos en el tintero. De Posteguillo había leído la biología de Julia y "Roma soy yo", y los tres libros me dejaron impresionada. También he leído hace poco "La noche en que Frankenstein leyó el Quijote", que no tiene desperdicio y recomiendo a todos. Me quedaban sus dos trilogías: Escipión y Trajano. Así que empecé con la de Trajano. Son muchas páginas de excelente lectura y me ha llevado casi un mes terminarlo alternando con otras lecturas más cortas y livianas. Ha sido toda una experiencia y ya estoy deseando empezar con el segundo tomo, suerte que lo leo en mi librito electrónico y me lo puedo llevar a todas partes. Es una historia que te atrapa desde las primeras páginas, muy bien documentada y muy amena de leer. Un excelente trabajo que solo podía escribir Santiago Posteguillo, con esa habilidad que tiene de hacerte entrar la HISTORIA (con mayúsculas) por los ojos con una facilidad pasmosa, y que te resulte atrayente y adictiva. De Santiago Posteguillo te lo puedo recomendar todo, más si eres amante de la Historia, sin temor a equivocarme y en la seguridad de que no te va a defraudar. Y que no te asuste la cantidad de páginas ya que puedes dosificar la lectura al ritmo que quieras; te aseguro que cada vez que vuelvas a coger el libro entrarás de lleno en la historia y será como si la hubieras dejado aparcada un rato antes, al menos es lo que me ha pasado a mí. Tendrás horas y horas de entretenida y apasionante lectura. ¡Feliz lectura! 20 de mayo de 2023

Los asesinos del emperador es la primera novela de la "Trilogía de Trajano", del escritor Santiago Posteguillo. Fue publicada en el año 2011. La novela transcurre en el período entre el año 63 d. C y el año 99 D. C. describiendo la vida en el Imperio Romano desde finales del reinado de Nerón hasta el ascenso como emperador del hispano Trajano. La obra trata, entre otros asuntos, del difícil mantenimiento de la paz dentro de la propia Roma, muchas veces amenazada por guerras civiles, como en la rebelión de los pretorianos en la época del emperador Nerva; como las luchas en las fronteras del Imperio, amenazadas por los "bárbaros" dacios, sármatas, germanos,etc. Es la primera novela que leo de Posteguillo. Dudaba si me gustaría o no, porque mis expectativas eran altas, pero no me ha defraudado. Me han gustado mucho las descripciones, sorprendentemente para mí, sobre todo las de batallas y las de las luchas entre los gladiadores. También me han agradado los diversos personajes, algunos simbolos de la rectitud y la honradez, como los dos Trajanos; y otros representantes de la vileza y la tiranía, como el emperador Domiciano, que, loco perdido, mandó matar a tantos hombres a los que consideraba sus enemigos. Buena parte de la novela trata sobre la conspiración urdida en palacio contra este tirano, en la que se planea su asesinato. En la novela se verá si los conspiradores se salen con la suya o no. Por otra parte, quiero recalcar que el autor se ha documentado ampliamente para escribir esta novela, realizando un retrato fidedigno de la existencia en Roma y en las fronteras del Imperio, de la vida tanto militar como civil,y de los diferentes estamentos de la sociedad, desde el emperador, en la cúspide, pasando por los legati y los senadores, y acabando con los gladiadores, prostitutas y esclavos. Queda decir, por último, que recomiendo encarecidamente su lectura, tanto para disfrutar como para conocer más sobre el Imperio romano. Tira un poco para atrás su extensión, ya que en su versión en papel son más de 1200 páginas, pero, a pesar de esto, en ningún momento se hace aburrido ni tampoco tienes la sensación de que le sobre páginas. Ahora voy a por la segunda parte, Circo Máximo, que espero que me guste como esta primera parte.

Woouu!!... Lo primero que puedo decir es que, es un libro increible, intrigante desde la primera página, me sumergió de lleno en la historia del imperio romano. La forma del empezar de la novela, por sí, ya es atrapante, con una conjura hacia el emperador Domiciano. Cuándo estamos a punto de saber como se desarrolla ésta... Pum! La historia da un salto temporal y nos cuenta el principio de todo, desde el emperador Nerón hasta la llegada de Trajano al poder y si, es bastante historia y se debe recurrir al glosario determinadas veces. Muy buena ambientación en la época romana y la documentación es enormemente amplia y detallada sobre las costumbres y tradiciones antiguas de estos tiempos, se destaca el gran trabajo que ha realizado Posteguillo, es impresionante. La novela contiene de todo, traición, romance, guerras, muertes y lealtades, con sus más de 1200 páginas la lectura es muy amena y la forma en que Postegillo la relata es maravillosa y entretenida.

Al principio sabes que hay una confabulación en contra del emperador, te exponen un plan perfecto en el 96 d.C. para matar a un tirano paranoico, pero, ¡ay! ¡no puede ser! El hombre en cuestión de quién no se ha dicho su nombre, no está a punto de morir. ¡Cada capitulo parecía ser el día del asesinato! Una vez el escritor nos a impregnado con una doliente desesperanza, nos devuelve en el tiempo hasta el año 63 d.C. hasta seis emperadores antes, sin embargo y a pesar de persistir la agonía, nos entretiene entre personajes honorables, bibliotecas, enseñanzas, discursos, ingenieros, gladiadores, pretorianos, más tragedia, traiciones,  por supuesto amistad y amor. Hay un número descomunal de personajes aliados que han sobrevivido y odian con todo su ser al emperador, por lo que la historia nos sumerge en las fatalidades que llevaron a que se formara esta conjura. Y Mientras Roma tenía sus problemas internos, los Dacios, en el Danubio y los Germanos en la frontera del Rin seguían defendiendo su territorio. La historia se entre tejen la cultura Romana del primer siglo, la destrucción que traen los imperios, la corriente evangelista que circulaba por el territorio después de la muerte de Jesús, las guerras por el dominio; a la par que se forman las que debieron ser las personalidades de quienes son nombrados. Pero gracias a las guerras y a las victorias de un hombre, nace la dinástica Flavia al igual que las ambiciones; por donde vamos en la lectura se sabe quién es el emperador paranoico y hombre insaciable que quiere poseer todo cuanto le venga en gana. Es un emperador que se sabe inteligente, astuto y un experto en “asedios”, se proclama “deus”, es un hombre que no le importa ni su familia ocasionando recelo y un odio profundo con su esposa, quien entierra su daga donde más le duele, con sus engaños y desafíos. Hasta que ¡por fin! Alguien matan al emperador Domiciano y tras varios sucesos sube Trajano al poder. Tan solo un siglo antes, la sociedad Romana en tiempos de Escipión nos relata Posteguillo que disfrutaban de obras de teatro, ahora en el transcurso de la historia de Domiciano disfrutaban de luchas con gladiadores; parecía que los Romanos poseían una gran sed de sangre, ¿O era el emperador? •Publicado en España 2011