Fuentes aprovecha esta novela para narrar el siglo XX a través de la vida de Laura Díaz: el devenir de México y USA. Laura Díaz, de ascendencia española y alemana (la misma del autor) y nacida a fines del siglo XIX, pasa por diferentes hechos históricos: la revolución mexicana, la guerra civil española, la primera y segunda guerra, el México gobernador por la dictadura del PRI. De paso, Fuentes se adentra mediante algunos amantes de la protagonista en la caza de brujas en USA (el macartismo), los campos de concentración nazis y revive la terrible matanza de Tlatelolco de 1968: "—Nadie tiene derecho a reconocer un cadáver. Nadie tiene derecho a llevarse a un muerto. No va a haber en esta ciudad quinientos cortejos fúnebres mañana. Arrójenlos a la fosa común. Que nadie los reconozca. Desaparézcanlos." En esta novela Fuentes compara dos sociedades: la clase dominante estadounidense construyó un país, mientras que la clase dominante mexicana expolió un país. Fuentes no tiene ningún reparo en criticar de la manera más dura posible a toda la clase política mexicana en general y al PRI en particular. Quedan como los mejores capítulos aquellos en los cuales intervienen Frida Khalo y su esposo Diego Rivera, además, de aquellos que narran la caza de brujas y la triste historia del famoso actor judío Jacob Julius Garfinkle más conocido como John Garfield. Novela larga, inteligente, que demanda atención, esfuerzo y compromiso de parte del lector.