En la Praga de los años treinta, Lenka, una joven estudiante de arte, se enamora perdidamente de Josef. Ambos se casan, pero, al igual que muchos otros compatriotas, sus sueños se hacen añicos ante la inminente invasión nazi y deciden huir a Estados Unidos. Sin embargo, en el último momento, Lenka decide quedarse en Praga. En Estados Unidos, Josef se convierte en un obstetra de éxito y rehace su vida. Sin embargo, nunca olvidará a su primer y único amor, al que cree haber perdido para siempre. Pero en Terezin y Auschwitz, Lenka sobrevivirá gracias a la memoria de un marido al que cree que no verá de nuevo y a su talento artístico. Décadas más tarde, un inesperado encuentro en Nueva York ofrece una segunda oportunidad a los amantes.
Vidas truncadas, pérdidas, experiencias insuperables que persiguieron a sus victimas a lo largo de la vida, estos fueron los resultados del cruel antisemitismo Nazi. Niños, ancianos, mujeres embarazadas; no existía piedad para ninguno de ellos. La crueldad de unos Psicópatas escondidos tras ideales que, aunque sea difícil de comprender, convencieron a muchos y asustaron a otros tantos que sufrieron el dolor de los que antes habían sido sus vecinos y amigos. Alyson Richman nos cuenta una historia que podía haber sido de amor pero que, en el contexto del que hablamos no hay cabida para ello e, inevitablemente, se convierte en una historia de pérdida. Aún así, no es ni mucho menos el libro más duro que he leído sobre el holocausto. Creo que se debe al lugar donde se desarrollan los hechos, el campo de Terezín. Este no fue un lugar de exterminio, sino un puente hacía los campos donde, más tarde, miles de los judíos que pasaron por allí serían ejecutados. La autora hace una exhaustiva investigación sobre este gueto y las personas que allí estuvieron, lo que le permite tomar de la realidad algunos personajes y hacerlos convivir con otros ficticios. Hay algunas curiosidades sobre algunos de ellos que no deben pasar, para nada, desapercibidas. Es la misma autora la que en el epílogo lo explica, lo cual, la verdad, se agradece mucho porque enriquece la lectura. Dos jóvenes se enamoran en la antesala de la entrada de los nazis a Praga. Las circunstancias y, sobre todo, el sentimiento de amor y fidelidad a la familia, los conducirá por diferentes caminos que la autora va desarrollando capitulo tras capítulo. Esto la lleva a constantes cambios de tiempo, que no se mueven en paralelo. Viviremos la historia de Lenka durante el trascurso de la guerra y ,sin embargo, la de Josep se alargará en el tiempo. Esta diferencia temporal nos muestra las dos caras de una misma moneda. por una parte, la vida real del horror del holocausto y, por otra, el dolor de la pérdida de quien no llegó a vivirlo pero sufrió las consecuencias. La pintura, y gran cantidad de artistas, se mueven por Terezín mostrando los muchos recursos que esta puede llegar a aportar. La que lucha, la que endulza la vida de los niños, la que recoge recuerdos y la que se vende para salvar la propia vida y la del ser querido. Para mí esta historia tiene algo de especial, hace años que visité Praga y pude ver muchas de las cosas que describe la autora y, concretamente, algo que me impresionó muchísimo, los dibujos que los niños hicieron y que están expuestos en el museo judío. "Frield Dicker Brandeis llegó a Terezín en diciembre de 1942 y casi de inmediato empezó a impartir clases de arte a los niños que habitaban allí"
LOS AMANTES DE PRAGA “Si colocas un rayo de sol entre las palmas de tus manos, se convierte en sombra; si atrapas luciérnagas en un frasco, mueren. Pero si amas como si tuvieras alas, siempre sentirás la emoción de estar suspendido en pleno vuelo.” Comienzo con esta frase como parte de tantas cosas que he aprendido con este libro, que si bien en Alibrate aparece como Novela Romántica, su género real es “Novela literaria y Ficción Histórica” según su editorial, sin embargo, he visto el amor bonito y sobre todo sincero, que hoy escasea en el mundo real, pero que con todo esto, no deja detrás el arte, las vivencias de esos tiempos difíciles, y el romance, en una historia que cuenta de un amor perdido en tiempos de la segunda guerra mundial. Esta novela narra la historia a través de la vida de Lenka y Josef, dos chicos de Praga que se enamoran a punto de explotar la invasión alemana a Bohemia y Moravia (Checoslovaquia), y buscan emigrar antes de que se arme el despelote. Narrada en capítulos en primera persona, nos transporta en el tiempo, haciendo saltos y logrando trasladarnos a esos magníficos escenarios tanto en Europa como en América, con una descripción bastante completa, un lenguaje delicado, y utilizando herramientas de ambientación como el arte y la música. En definitiva, una historia profunda que sin tocar más allá de la crueldad conocida en los campos de concentración, no deja de ser dura, difícil y desgarradora, donde los personajes llevan toda una vida marcada por la guerra, por la incertidumbre, por las decisiones tomadas con una firmeza. Una historia de amor breve pero tan intensa que a través de sus páginas, relata lo vivido por los protagonistas hasta sus últimos días. Creo que el libro comienza un poco lento y lineal, pero a medida que se desarrolla, va tomando cierto rumbo y es justo luego de la mitad, que sientes esa intriga, que no puedes soltarlo para ver que pasa en cada uno de sus capítulos. También toca distinguir el trabajo realizado por la autora, un trabajo arduo para poder documentar y componer esta novela con hechos reales y que se combinan como fuera un todo. Si te gustan las historias mezcladas con amor y en tiempos de guerra, debes ponerla en tu lista de novelas por Leer.
Este libro, me hizo llorar sinceramente, creo que debería de existir un género que solo abarque el rollo de hacerte llorar y sentirte impotente. Las primeras páginas, muy pocas, te van presentando a algunos personajes de este libro, y es una presentación muy buena, para nada aburrida, y ya cuando va llegando a la mitad es cuando se formando una historia de horror que ya todos conocemos como el holocausto. El futuro de, Lenka y Josef se derrumbó totalmente al llegar la segunda guerra, la de millones en si. No pudieron disfrutar de su amor y hasta décadas después es cuando se reencuentran y es cuando vamos conociendo su vida y todo lo que tuvieron que pasar para sobrevivir. Creo que cada libro que trata sobre la segunda guerra es un recuerdo de tanto dolor infringido en muchas personas que no pintaban para nada en peleas políticas. Creo que al final con cada capítulo llore un poco, aunque su final en si, no me convenció mucho, lo que me gustó fue de donde fueron tomadas las ideas para esta historia.
El amor se convierte en el rayo de aliento y esperanza, al que muchos nos hemos de aferrar. Algunos para sobrellevar los momentos más difíciles de la vida, otros para creer vivir y sentir en un mundo tan real, donde se ha perdido toda la motivación. El título "Los Amantes de Praga" me sugería una novela completamente romántica, pero no. Si bien la historia de amor entre Lenka y Josef es un elemento muy importante dentro del libro, se convierte en el pretexto para ilar las vidas de los protagonistas, pero sobre todo conocer dos caras diferentes, en el contexto de la Segunda Guerra Mundial. Como muchos escritos que pueden existir al respecto, esta novela es bastante conmovedora, donde su autora a través de la investigación, logra darle vida al personaje de Lenka, inspirándose en Dina Gottliebová, quien en realidad, en su momento, fue la persona que realizó la controversial pintura de un mural de Blanca de Nieves y los siete enanitos, en las barracas de los niños del campo de concentración de Auschwitz, llegando a tomar la atención de personas importantes como el Dr. Josej Mengele. Este es un libro bastante emotivo, donde el amor se hace evidente desde diferentes formas (pareja, familia, amigos). Su narración me gustó mucho, pues es contado paralelamente por sus dos protagonistas, y en diferentes tiempos (algo que se me hizo enredado un poco al comienzo), pero es una forma que no lo hace lineal ni aburrido, y en cuyas páginas conectamos fácilmente con sus personajes. Definitivamente es una historia que nos invita a no olvidar nunca, aquel Holocausto que cobro la vida de millones de personas. Totalmente recomendado.
🌉🤍 • Puede conjugarse el amor espontáneo y gradual, el desarraigo de a gotas, el horror inaudito, la impotencia inminente, y el recuerdo eterno... Alyson Richman lo logra en este relato, plasmando un enorme contraluz de sensaciones, envuelto en la elegante, bohemia, y gótica atmósfera que Praga convida; y el sombrío, horroroso, y espeso aire que los eventos bélicos conllevaron. Una historia de amor única, que atraviesa complicidad, química, desgarro, crueldad, valentía, dolor... pero jamás olvido. Transmite y representa lo duro que puede resultar permitirse sentir, en una esfera de alerta y frialdad constante. Los saltos temporales se intercalan, junto con la voz de otras generaciones y con la Historia como detonante de cada contexto; el arte se propone cual dulce condimento del poder estético que la autora previene y se encomienda. En lo personal, me regaló recorridos por los puentes checos nuevamente, y recordar su unicidad; aún así me resultó complicado digerir descripciones crudas. Me encantó leerla conjuntamente, ya que me aportó cierta liviandad. Una historia bifurcada y expresiva, dura pero tierna, esperanzadora y lamentablemente real. • 🤍🌉
Los Amantes de Praga es una historia de amor en tiempos de la segunda guerra mundial. Aunque es una historia sobre el holocausto no es tan duro como otros libros que he leído sobre el tema. Se centra más en las historias de las personas, en las vidas truncadas, en las pérdidas, en el sufrimiento del alma. Aunque por supuesto también leeremos acerca de las duras condiciones en las que le tocó vivir y morir al pueblo judío. Josef y Lenka, judíos de origen checo, viven un gran amor de juventud, pero les toca vivir tiempos convulsos y la vida tiene para ellos unos planes distintos a los que han forjado. La vida los separará, y en este libro Josef y Lenka, en capítulos alternos, nos cuentan la vida que les tocó vivir a cada uno de ellos, su historia hará que nuestro corazón se resquebraje, que nos indignemos y suframos con ellos por tanta barbarie y tanto sufrimiento. La historia parte, como indica la autora, de un hecho real, y en el conjunto introduce personajes y hechos concretos reales, como los cuadros que de forma clandestina los artistas del gueto de Terezin hacían llegar al exterior para que el mundo conociera lo que estaba sucediendo. Una gran historia bellamente narrada. Un poco lenta al principio, pero la magnífica pluma de la autora nos invita a seguir leyendo, poco a poco la historia nos atrapa y ya no podemos soltarla. Al final, por supuesto, lloré 😊
Me permitiré y considero necesario dividir esta reseña en 3 partes para tratar de explicar el tobogán de sentimientos y emociones en los que me vi involucrado al leer este libro. Primer 30%: El libro comienza con una historia bastante lenta, donde simplemente conoceremos el entorno y la vida de cada uno de los personajes. Sin embargo es en esta parte del libro donde la exquisitez de la pluma de la escritora logró mantenerme conectado y no aburrirme un solo instante. La descripción de los lugares, los aromas, los personajes y sus sentimientos son sencillamente únicos y perfectos. Este primer 30% del libro hizo revivir en mí todos esos lindos sentimientos que nos despierta en la vida un primer amor. 30%-80% de libro: comienza la acción y los acontecimientos no pararán uno tras otro, disfruté de una lectura llena de ires y venires, donde la vida de los personajes cambia para siempre en el entorno de una guerra que acaba de estallar. Reí, me angustié y sufrí con cada uno de los personajes y les aseguro que así todos conozcamos muy bien lo que sucedió en la segunda guerra mundial y el holocausto, siempre descubrimos nuevos hechos y situaciones que nos llevan a reflexionar ampliamente sobre la maldad del ser humano y los límites que podemos alcanzar en determinadas situaciones. Último 20%: No lloré, fue solo un final del libro que se me metió en el ojo. No tengo mucho más por decir, simplemente por más duro que uno pueda ser es inevitable que la parte final de este libro no logre tocar las más profundas fibras y hacernos pensar en todos y cada uno de nuestros familiares y seres amados. No siendo más sólo me resta por decir que si no han leído este libro y está dentro de sus pendientes, no duden en hacerlo. Vale cada minuto de lectura que inviertan en el.
Una gran novela sobre el poder del amor y la fuerza de la memoria. En la Praga de los años treinta, Lenka, una joven estudiante de arte, se enamora perdidamente de Josef. Ambos se casan, pero, al igual que muchos otras personas, sus sueños se hacen añicos ante la inminente invasión nazi y deciden huir a Estados Unidos. Pero, en el último momento, Lenka decide quedarse en Praga y no abandonar a sus padres y su hermana. En Estados Unidos, Josef se convierte en un obstetra de éxito y rehace su vida. Sin embargo, nunca olvidará a su primer y único amor, al que cree haber perdido para siempre. Pero……., en Terezin y Auschwitz, Lenka sobrevive gracias a la memoria de un marido al que cree que no verá de nuevo y a su talento artístico. Décadas más tarde, un inesperado encuentro en Nueva York ofrece una segunda oportunidad. Una novela que te atrapa desde la primer hoja. Excelente prosa de la autora para dar vida a un relato exquisito. Hace rato tenía pendiente este libro; y si bien es cierto que ya hemos leído mucho sobre la SGM, brindo porque seguimos encontrando relatos que nos hacen reflexionar sobre la humanidad y rescatan el amor por sobre todas las cosas.
Cada persona tiene una imagen o memoria que guarda en secreto. Una que tiene que desenvolver, como un trozo de caramelo, por las noches.
¿Así es como se sienten los besos del hombre al que amas? Todo fuego y calor. De tonos púrpura. Índigo. El rojo azulado que corre por nuestras venas antes de tocar el aire.
A menudo me pregunto si esa es la maldición de la vejez : sentirte joven en tu corazón mientras tu cuerpo te traiciona .
¿Es esta la primera señal del amor? En la persona a la que estás destinado a amar escuchas el sonido de los que aún no han nacido.
𝙴𝚗 𝚕𝚊 𝚙𝚎𝚛𝚜𝚘𝚗𝚊 𝚊 𝚕𝚊 𝚚𝚞𝚎 𝚎𝚜𝚝𝚊́𝚜 𝚍𝚎𝚜𝚝𝚒𝚗𝚊𝚍𝚘 𝚊 𝚊𝚖𝚊𝚛 𝚎𝚜𝚌𝚞𝚌𝚑𝚊𝚜 𝚎𝚕 𝚜𝚘𝚗𝚒𝚍𝚘 𝚍𝚎 𝚕𝚘𝚜 𝚚𝚞𝚎 𝚊𝚞́𝚗 𝚗𝚘 𝚑𝚊𝚗 𝚗𝚊𝚌𝚒𝚍𝚘. 🤍🌉
La pelvis de una mujer es como un reloj de arena capaz de medir el tiempo. Crea y alberga la vida a un mismo tiempo. Cuando la dieta de la madre es insuficiente, se extraen los nutrientes de sus propios dientes y huesos. Las mujeres están hechas para ser altruistas.